En Córdoba: cuál fue la estrategia del shopping más grande del interior para superar la salida de Falabella

CÓRDOBA.- El NuevoCentro Shopping -inaugurado en la ciudad de Córdoba en 1990 y el más grande del interior del país- afrontó el desafío de reestructurarse cuando, en marzo del año pasado, la chilena Falabella cerró y se fue del país. Ocupaba 8000 metros cuadrados que se transformaron en 40 nuevos locales. Con una inversión de US$2 millones la estrategia fue sumar nuevas propuestas comerciales, gastronómicas y de servicio que “abarcaran” lo que tenía la tienda.

La modernización y ampliación -que incluye el cambio de la marca del supermercado que está desde que se abrió el shopping- es una apuesta a que regrese la cantidad de visitantes que había antes de la pandemia del Covid-19.

El promedio era de 25.000 personas por día; apenas reabrieron en la pandemia fueron entre 12.000 y 15.000 y hoy se está en 22.000 pero con menos tiempo de permanencia: pre Covid-19 era de 90 minutos; a los meses de la reapertura, 30, y ahora es de aproximadamente 60 con algo más de tiempo los fines de semana.

La tienda chilena tenía 280 empleados y los nuevos locales ocupan a 350 personas. Los rubros que desembarcaron son indumentaria, deporte, librería, perfumería, óptica, farmacia, gastronomía, bazar, decoración, muebles y blanquería y agencia de turismo.

Antonio Heinz, director de NuevoCentro, explica a LA NACION que la salida de Falabella les significó una “disyuntiva”. Buscaron, incluso otras tiendas en Chile para reemplazarla, pero “no hubo chances”. También se analizó la posibilidad de un “mega hiper mercado” pero terminaron decidiéndose por convertir toda el área en comercial.

“Sumamos un gimnasio de 1500 metros cuadrados en la playa subterránea, con un ventanal hacia la calle -describe-, que tiene 2000 socios mensuales. Una elección impulsada por la seguridad, la posibilidad de estacionamiento gratis durante dos horas y la calidad del servicio”.

Aunque la inversión inicial proyectada era de US$1 millón se amplió porque se avanzó en una reforma de todo el edificio. Con el estudio del arquitecto Adolfo Mondejar se ensancharon los pasillos y se “perforó” la estructura hacia la ciudad con balcones y ventanales. “Se siguió la tendencia mundial en centros comerciales”, acota Heinz.

La empresa dueña del shopping es Capdell, conformada por dos familias cordobesas, cuenta con 170 propuestas comerciales y 1500 empleados. La facturación de setiembre pasado en pesos, creció 164% en la comparación interanual ($1278 millones).

Heinz subraya que el nivel de ocupación es del 100%; solo quedan 700 metros cuadrados más un entrepiso de 300 metros cuadrados que está reservado para un espacio gastronómico. Están negociando con dos firmas nacionales. “En alquileres y gastos comunes ya estamos en los mismos niveles que cuando estaba Falabella”, agrega.

Espera que el cambio de marca del supermercado -aunque ambas son del mismo grupo- actúe como un atractivo más para los clientes. La superficie pasa de 1500 a 2100 metros cuadrados, con más productos frescos y perecederos.

Con estacionamiento para 1900 autos, presentaron ante la Municipalidad de Córdoba, un proyecto de ampliación de la playa de estacionamiento (se tecnificó el sector ya que la “seguridad es uno de los pilares”) y dos pulmones de 3000 metros cuadrados de manera de poder agregar nuevas mega tiendas si existe la oportunidad.

La reapertura del exhotel Sheraton, con el nombre Quinto Centenario hasta tanto terminen negociaciones con dos cadenas internacionales también es un aliciente para el centro comercial que está enfrente.

“Esto es bueno para Córdoba, para el turismo y por supuesto para el movimiento del shopping”, señala Heinz. El hotel comenzará a funcionar con el 60% de su capacidad habilitada, incluyendo los salones, el gimnasio, la pileta y el restaurante. En marzo estará operativo todo el edificio.