Córdoba: tomaron de rehén a un hombre, lo obligaron a entrar a una verdulería para robar y lo balearon en la nuca

La ciudad capital de Córdoba vivió un violento hecho en las últimas horas. Un hombre de 54 años fue baleado en la nuca, a sangre fría y cuando estaba tirado boca abajo en el piso, por uno de los delincuentes que había ingresado a robar a una verdulería. Segundos antes, esa persona había sido tomada de rehén por los ladrones que la sorprendieron afuera del local, cuando estaba en un vehículo esperando a su padre, y la obligaron a ingresar al comercio.

La víctima, identificada como Alberto, permanece internada en estado reservado tras ser intervenida quirúrgicamente. El proyectil le provocó un orificio de entrada y salida a la altura del cuello y perdió mucha sangre.

Alrededor de las 8 del pasado domingo, Alberto, su mujer y su padre habían salido a hacer las compras al barrio Matienzo, en Córdoba capital. Mientras el mayor de los hombres fue en búsqueda de lo que necesitaba, la víctima se quedó al volante de su utilitario, estacionado en la calle.

Fue entonces que tres delincuentes, a bordo de una moto, tomaron de sorpresa al automovilista y a punta de pistola lo obligaron a descender del rodado. “¡Bajate, bajate!”, le gritaban, contó la mujer.

A los empujones, dos de los asaltantes lo llevaron hasta dentro de la verdulería, que acababa de abrir sus puertas, mientras Alberto le decía a su señora que corriera. La mujer de la víctima pudo escapar por detrás de la camioneta. “El que manejaba la moto me tiró tres tiros cuando llegué a la esquina pese a que le tiré las llaves de la camioneta”, relató la mujer a Telefé Córdoba.

Los ladrones se movían con extrema violencia, tal como quedó registrado en las cámaras de seguridad de la verdulería “Carlitos”. Mientras uno de ellos vaciaba la caja registradora al grito de “¡Dame la plata!”, el otro sujetaba a la víctima y la apuntaba con el arma. Luego, la tiró al piso y le apoyó el revólver en su cuello. Cuando emprendían la huida con el botín, uno de los asaltantes le disparó al rehén a sangre fría y escapó.

Ante el grito desesperado de los presentes, que veían como la víctima se desangraba en el suelo, el hombre fue trasladado por el servicio de emergencia del 107 al Hospital de Urgencias, donde fue intervenido quirúrgicamente por la herida de gravedad que le provocó el disparo. “Sé que se va a salvar”, dijo la mujer de la víctima, visiblemente afectada.

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