Dos policías de la Federal mataron a uno de los cinco ladrones que quisieron robarles el auto

Dos oficiales de la Policía Federal Argentina, que estaban de civil, se enfrentaron a tiros con cinco delincuentes que quisieron robarles el auto en el que se movilizaban. En el feroz intercambio de, al menos, 30 disparos uno de los ladrones murió y los oficiales resultaron heridos.

Según el parte oficial el hecho ocurrió minutos antes de la medianoche cuando los efectivos: un hombre, que estaba al volante; y una mujer, que se acaba de subir al vehículo blanco de alta gama, son sorprendidos por cinco delincuentes que se movilizaban en un auto gris oscuro. En los videos se ve cómo salen de una vivienda y suben al auto los efectivos y dos personas más.

Cuando el vehículo blanco estaba por salir, del auto gris se bajaron cuatro de los delincuentes que rodearon el vehículo donde estaban los uniformados y, cuando quisieron hacerlos descender, comenzó el feroz enfrentamiento que quedó registrado en varias cámaras de seguridad privada situadas en la calle Carabobo cerca del cruce con Berón de Astrada, en Ramos Mejía, partido de La Matanza.

Durante la balacera, uno de los delincuentes murió, mientras que los dos oficiales resultaron con heridas. En el caso de la oficial, fue alcanzada por dos impactos: uno en una de sus manos y otro en una pierna. En tanto, su compañero recibió un disparo en la zona del tórax por lo que ambos fueron trasladados al El Hospital Zonal General de Agudos Alberto Balestrini.

Sobre el delincuente muerto, de 25 años e identificado con las iniciales CAC, logró ser trasladado con vida al Hospital Interzonal General de Agudos Luis Güemes, donde murió a raíz de los múltiples disparos que recibió en las piernas y en la zona media del cuerpo.

En tanto, los otros cuatro ladrones huyeron y se desconoce, hasta el momento, si resultaron con heridas tras el enfrentamiento. Interviene en la causa el fiscal Claudio Fornaro, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucciones (UFI) de Homicidios de La Matanza.

El nuevo protocolo de Bullrich

Este caso se suma a otros enfrentamientos que se dieron en los últimos meses, donde delincuentes jóvenes fueron abatidos cuando intentaron robar a uniformados que estaban de civil.

El miércoles pasado, la Ministra de Seguridad de la Nación anunció la puesta en marcha de un reglamento general para el empleo de las armas por parte de los miembros de las Fuerzas Federales de Seguridad que le permitirá mayor libertad de acción a los uniformados. Esto generó reparos por parte de la Justicia ante la posibilidad de avances sobre lo que establece el Código Penal.

El nuevo protocolo alcanza a los efectivos de las cuatro fuerzas federales: la Policía Federal Argentina (PFA), la Prefectura Naval Argentina (PNA), la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).

Allí se establece que serán los responsables de esas fuerzas de seguridad, la Justicia Nacional de Instrucción y la Justicia bonaerense los encargados de evaluar si las conductas de ambos efectivos están contempladas en el artículo 34 del Código Penal, que establece las circunstancias en las que un homicidio no es punible porque se trató de un caso de legítima defensa.

“El que obrare en cumplimiento de un deber o en el legítimo ejercicio de su derecho, autoridad o cargo. El que obrare en defensa propia o de sus derechos, siempre que concurrieren una agresión ilegítima, la necesidad racional del medio empleado para impedirla o repelerla o la falta de provocación suficiente por parte del que se defiende”, explicaron.

Consultados por LA NACION, tras el anuncio de Bullrich, diferentes funcionarios judiciales mostraron reparos sobre el alcance del nuevo reglamento y su validez legal. Un fiscal de la Provincia de Buenos Aires dijo: “Está pasando por arriba del Código Penal. Legítima defensa es un tema de fondo. Tiene que cambiar el código. Si no, después pagan el pato los policías. Como Chocobar”.

En tanto, un camarista de casación, consultado por LA NACION sobre el nuevo protocolo, dijo: “En principio, las acciones no punibles son las que detalla el artículo 34 del Código Penal. Lo que caracteriza a la legítima defensa es la agresión ilegítima. Además de la necesidad racional del medio empleado. Esto no puede ser modificado por protocolo. Ahora en el mismo artículo se habla del cumplimiento de un deber, pero este habrá que evaluarlo casuísticamente”.