¿Drogas adulteradas? Investigan la muerte de un preso alojado en la cárcel de Ezeiza

La muerte de un preso alojado en la cárcel de Ezeiza, prisión que depende del Servicio Penitenciario Federal (SPF), derivó en una investigación que intenta determinar si el interno falleció después de haber consumido estupefacientes adulterados.

Así lo informaron a LA NACION calificadas fuentes judiciales. El preso, cuya identidad no fue informada por los voceros consultados, murió hoy en el Hospital Zonal General de Agudos Doctor Alberto Antranik Eurnekian de Ezeiza, donde había derivado desde la cárcel por una intoxicación.

Tras el fallecimiento del interno, el juez federal Luis Armella, ordenó un allanamiento en los pabellones y oficinas de la cárcel.

“Primero se pensó que se trataba de una intoxicación por comida en mal estado. Pero, si bien falta el resultado de la autopsia, se maneja la hipótesis de que la persona muerta había consumido drogas y esos estupefacientes estaban adulterados. Hubo otros tres presos internados por la misma situación”; sostuvo una fuente consultada.

La hipótesis que manejan los investigadores hizo recordar lo sucedido a principios de febrero pasado, cuando 24 personas murieron después de haber consumido cocaína adulterada con carfentanilo, un opioide 10.000 veces más fuerte que otras sustancias como la heroína y el fentanilo.

Esa droga había sido vendida en búnkeres de Puerta 8, un asentamiento de Tres de Febrero. Además de los 24 muertos, otras 100 personas resultaron intoxicadas.