El final de la banda que amplió con metanfetaminas la oferta “clásica” de cocaína y marihuana en el Oeste del conurbano

Luego de una extensa investigación, la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) desbarató a la organización criminal liderada por “El Diablo”, un narco que operaba en la zona de San Justo, en el partido de La Matanza, y en el barrio de Liniers, la cual se dedicaba al acopio, distribución, y comercialización de droga.

Al cabo de un amplio operativo que incluyó 19 allanamientos en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y Pergamino, fueron arrestadas 12 personas y se secuestró cocaína, marihuana, metanfetaminas, balanzas de precisión, vehículos, armas de fuego, municiones y celulares, entre otros elementos.

El comienzo de la investigación data de finales de 2018. Entonces fue detectado un grupo de individuos que presumiblemente se dedicaban al narcomenudeo de distintas sustancias. El avance de la pesquisa determinó que resultaron ser consumidores que obtenían la droga mediante pasamanos ocasionales. Aun así, los investigadores profundizaron los trabajos de inteligencia mediante intervenciones telefónicas y seguimientos. De esta manera lograron dar con el líder de esta banda narco criminal, a quien apodaban “El Diablo”.

Siguiendo los pasos de la organización, a partir de una orden judicial, este domingo los oficiales interceptaron un vehículo en la zona de Liniers, y arrestaron a sus tres ocupantes, de nacionalidad peruana.

Luego se desencadenaron los allanamientos que continuaron hasta el lunes: tres en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; cuatro en Caseros (Tres de Febrero); dos en Lomas del Mirador; dos en La Tablada, y otros en San Justo, Ramos Mejía (La Matanza); Hurlingham; General Rodríguez; Moreno; Merlo; Parada Robles (Exaltación de la Cruz), y Pergamino, en la provincia de Buenos Aires.

Para el director nacional de la PSA, José Glinski, “la presencia de diversos tipos de estupefacientes trae aparejado indirectamente mercados de consumo en crecimiento, como el de las drogas sintéticas. Esto nos conduce a salir de la mirada binaria que permea el control del narcotráfico centrado en las drogas de base orgánica (cocaína y marihuana). Además, el decomiso de armas, municiones y una ingente cantidad de equipos de comunicación son indicios de un modus operandi violento y sofisticado”.

Por otro lado, Glinski destacó “el sentido ascendente de la investigación desde la base operativa consumidor/vendedor, pasando por los encargados de planificar la cadena de suministro, hasta el actor situado en el vértice del grupo criminal, que finalmente fueron detenidos”.

Como resultado de los procedimientos, el personal policial detuvo a 12 personas -ocho varones y cuatro mujeres- e incautó 355,8 gramos de clorhidrato de cocaína; 34,2 gramos de metanfetamina; 16 plantas y semillas de cannabis; cinco frascos con marihuana; tres balanzas de precisión; 826.940 pesos; 1369 dólares; 735 euros y dos máquinas de contar billetes.

También se secuestraron tres autos, cinco armas de fuego de diversos calibres, 61 municiones, 81 teléfonos celulares, cinco tablets, tres computadoras, otros dispositivos electrónicos y documentación de interés.

La causa quedó en manos de la jueza Alicia Vence, que está a cargo del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional de Tres de Febrero.

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