San Francisco Solano: dos motochorros se subieron a la vereda para robarle a una madre delante de sus hijos de 7 y 10 años

Era plena luz del día. Sonia, su madre y dos de sus hijos se habían acercado al kiosco del barrio, en la localidad de San Francisco Solano -dividida entre los partidos de Quilmes y Almirante Brown-, para comprar cuando fueron sorprendidos por un par de motochorros que subieron a la vereda con el rodado para robarles. Mientras una de las mujeres forcejeaba, el terror se apoderó de los niños de 7 y 10 años. La más pequeña salió corriendo desesperada, en tanto que su hermano presenció pasmado el violento momento.

La de ayer se trataba de una jornada dominguera más. Sonia había ido con sus cuatro hijos a visitar a sus padres en esa localidad. La más joven de la familia cumplía siete meses de vida y era una buena excusa para juntarse. Sin embargo, el día se vio empañado por la inseguridad que arrasa en el conurbano bonaerense.

“Salimos a comprar y cuando estábamos esperando que nos atendieran en el kiosco escuché el sonido de una moto”, contó Sonia en diálogo con LN+. No hubo tiempo de nada. En un instante el rodado ya estaba sobre la vereda. Uno de los ladrones comenzó a forcejear con la madre de los niños. La menor de 7 años salió corriendo desesperada hacia un lado y su hermano, de 10, presenció atónito el violento episodio.

La mujer empujó al delincuente y cuando el joven ladrón comenzó a atacar a la abuela de los niños se percató de la billetera que tenía Sonia. “Le pedí que me dejara los documentos, pero fue inútil”, relató la víctima. Para su tranquilidad, su beba de 7 meses no estaba con ella en ese momento, como así tampoco su otro hijo de 15 años.

Un vecino del kiosco les tiró un botellazo a los ladrones para intentar defender a las víctimas. Al parecer, los motochorros ya venían en un raid delictivo porque, inmediatamente, llegó un patrullero que parecía estar buscándolos y persiguiéndolos desde la avenida más cercana, según entendió Sonia.

La mujer decía esta mañana: “Te da bronca porque tengo cuatro chicos y no les dejas nada. Hay mucha inseguridad, es horrible lo que está pasando”. Su hija quedó tan asustada con la situación que tras ese momento quería volverse a su casa. En cambio, el niño de 10 años le dijo a su madre que él “quería tirarles algo también” a los malhechores que eran “jovencitos”, contó Sonia.

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