Entusiasmo en Mar del Plata por el regreso del tren

MAR DEL PLATA. Entusiasma esa multitud que en conjunto bajó de la formación y empieza a salir de la terminal. Ayer autoridades e invitados. Desde hoy, pasajeros de valija en mano y pasaje pago.

"Es apenas un punto de partida, lo fundamental es que ande bien y ya no se corte”, coinciden José Luis y Marcelo, dos taxistas que conocieron los tiempos de tres servicios diarios y cinco los fines de semana. De llegada y partida, casi a butaca caliente.

La reactivación de este medio de transporte, primero herido durante décadas por la precariedad de las formaciones y luego paralizado hace más de dos años por el mal estado de las vías, era un reclamo de todos los sectores vinculados a la industria turística local.

“Es un motivo para festejar porque volvemos a estar comunicados con un medio que es más seguro, ahora muy cómodo y si logra hacerlo rápido puede ser hasta más efectivo que un vuelo”, dijo a La Nación el presidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica, Avedis Sahakian, que también lo valora y mucho como generador de empleo.

Un empresario con plantas de procesamiento en el puerto local recordaba días atrás cuando enviaban pescado fresco en vagones de carga. “En cuatro horas y media o cinco estaba a la venta en una pescadería de Buenos Aires”, destacaba. Cincuenta años después, con similar recorrido, siete horas tardará el tren que con unidades renovadas y mayores comodidades intentará competir con los ómnibus, aviones que cada vez tienen más frecuencias y el automóvil, sin dudas el medio más utilizado para llegar hasta esta playas.

Un tren directo que pueda cubrir estos 400 kilómetros en tres horas o no más de cuatro asoma como el ideal a perseguir por una propuesta que en su regreso a escena aparece como un gran beneficio para la docena de escalas que tiene el trayecto desde Plaza Constitución hasta la estación ferroautomotora marplatense.

Gabriela Magnoler, presidente del Ente Municipal de Turismo (Emtur), reconoció que tener de nuevo el tren entre los servicios de transporte de pasajeros es “una gran emoción” para los marplatenses y “una enorme expectativa” por lo que representa en términos de optimizar la conectividad de esta ciudad con Capital Federal y localidades de la provincia. “El precio del boleto es muy accesible y lo primordial de aquí en más será mejorar los tiempos de duración del viaje”, resaltó.

Sahakian recuerda que el tren canalizó siempre entre el 10 y 15% de arribos de turistas a la ciudad. Un porcentaje similar a la merma de visitantes que se dio desde que la locomotora apagó sus motores. “No es cierto que la falta de tren nos provee un viajero más pudiente”, asegura el empresario gastronómico. “Su regreso es en sí mismo un beneficio y si además es rápido ganaríamos además en turismo de calidad”, dijo a La Nación.

La reaparición en escena del ferrocarril coincide con uno de los picos de frecuencias aéreas, no solo por los servicios de las líneas tradicionales sino porque se suman a la competencia las aerolíneas del tipo “low cost”. Pero en casi todos los casos para saturar el tramo más rentable, que permite llegar a Aeroparque o Ezeiza. El objetivo perseguido por la industria turística local es sumar más vuelos directos con capitales de provincia –como ocurre en verano con Córdoba, Tucumán o Mendoza- o de países limítrofes, como Paraguay, Bolivia o Brasil.

Del otro lado de la Avenida Luro, frente a la Automotora y al frente de la sandwichería y casa de comidas Eluney, Ramón comentó a La Nación que el regreso del tren es una excelente noticia. “Primero porque es trabajo para un montón de gente que es parte del servicio y temía por su futuro”, dice de quienes a escuchado a diario con sus días/años de incertidumbre. Ahora se entusiasma además por lo que se pueda ganar en turistas: “Sin dudas como servicio tendrá su buena cantidad de pasajeros y nosotros, hoteles y la ciudad en general tendremos beneficios”, aseguró.