Una argentina es la primera mujer jefa de clima de la ONU y busca proteger a los más vulnerables del cambio climático

La argentina Celeste Saulo asumió como nueva secretaria general en la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Desde el 1 de enero, la exdirectora del Servicio Meteorológico Nacional es la primera mujer y primera sudamericana en ocupar el máximo puesto en el organismo y aseguró que quiere dar prioridad a los países más vulnerables ante la aceleración del cambio climático y el aumento de los fenómenos extremos.

“El cambio climático constituye la mayor amenaza mundial de nuestro tiempo, y el aumento de la desigualdad agrava sus impactos. Acabamos de vivir el año más cálido del que se tiene constancia y una vez que los efectos del actual episodio de El Niño se dejen sentir plenamente en las temperaturas y los fenómenos meteorológicos”, declaró la profesora, en un comunicado publicado este jueves en el sitio de la organización. Y agregó: “Las actividades humanas e industriales son claramente las responsables”.

La nueva titular de la OMM, quien reemplazó en el cargo al finlandés Petteri Taalas, sostuvo que enfocará su trabajo para materializar su visión de un mundo donde todas las naciones, en especial las más vulnerables, sean más resilientes a los episodios extremos relacionados con el tiempo, el clima, el agua u otros fenómenos medioambientales.

Saulo, quien dirigía desde 2014 el Servicio Meteorológico Nacional argentino y era primera vicepresidenta de la la máxima autoridad meteorológica global, añadió que “viniendo del Sur Global, soy plenamente consciente de la necesidad de esforzarse por priorizar las necesidades de los más vulnerables”.

En el comunicado, la flamante secretaria general de la OMM afirmó que muchos de los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales carecen de recursos e insistió en que “incluso un pequeño aumento de la inversión genera enormes beneficios socioeconómicos para nuestras comunidades”.

En ese sentido, destacó que una de sus prioridades será reforzar la presencia de la OMM a escala regional y potenciar los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales mediante un “enfoque ascendente”. Además, desea fortalecer la diversidad geográfica en la Secretaría de la Organización.

Gran parte del trabajo de la OMM consiste en utilizar y compartir el trabajo de las agencias meteorológicas nacionales acerca de los gases de efecto invernadero, el nivel del mar, las temperaturas, el deshielo de los glaciares y otros indicadores del cambio climático.

Los Estados miembros de la OMM también aprobaron el año pasado la creación de una “Vigilancia Mundial de Gases de Efecto Invernadero” para poder contabilizar tanto los sumideros naturales de estos gases como aquellos relacionados con las actividades humanas. “Las actividades humanas e industriales son claramente las responsables”, afirmó.

Con información de AFP

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