Discos y libros, con identidad propia
Se reúnen en el nuevo local de la librería Yenny-El Ateneo, inaugurado recientemente en el shopping Alto Palermo
1 minuto de lectura'
A partir de la decisión de comercializar también material discográfico, la cadena de librerías Yenny-El Ateneo retomó, durante el año último, su política de expansión. No sólo reforzó, con la venta de discos decidida a comienzos de 2002 como respuesta frente a la crisis generalizada, la recuperación del espacio económico que antes ocupaba sólo con los libros, sino que logró añadir a sus localizaciones estratégicas una muy significativa. A partir del 2 de diciembre último, Yenny está en el shopping Alto Palermo.
Allí, en un local de muy generosas dimensiones, el estudio del arquitecto Fernando Manzone realizó el proyecto y la dirección de obra en un lapso muy acotado -apenas veinticinco días- un local que presenta su oferta discográfica en forma prolija y atractiva, mientras las publicaciones siguen las tradicionales líneas de la cadena, incluyendo su sector exclusivo para Yenny junior y la zona de estar para lectura, con los habituales sillones.
Con la experiencia de haber realizado quince sedes de la cadena de librerías Yenny, incluyendo la paradigmática casa que ocupó el cine Grand Splendid sobre la avenida Santa Fe, el estudio Manzone manejó con solvencia la encomienda de trabajar en un contexto con condicionantes precisas, como Alto Palermo, en un local con frente al exterior y en un cortisimo plazo de obra, resultado de la exigencia de los comitentes de inaugurar a tiempo para realizar las ventas propias de las fiestas de fin de año.
Así planteado el tema, Fernando Manzone recuerda con satisfacción la fiesta de apertura, con invitados especiales y corte de calles, cuya programación anticipada impedía su postergación. Y en este sentido valora el trabajo realizado con el arquitecto Di Pietro, a cargo de la coordinación para la ejecución de los locales en todos los shoppings del Grupo Los Altos.
Una buena organización
"Este es el primer local que debemos resolver con tres accesos -comenta el arquitecto Fernando Manzone-, tema complicado para una librería. Dos están controlados desde el shopping y uno es directo desde la calle, lo que genera circulaciones muy particulares."
Además, hubo pautas singulares de acuerdo con la ubicación zonal, según comenta el autor. Por ejemplo, se decidió que el espacio dedicado a la discografía de clásicos fuera mayor que en otras sedes de la librería, con un box especial, por el tipo de público que concentra.
La seguridad fue también otro tema muy destacado desde el proyecto y muy controlado, con sensores, cámaras y la previsión para la ubicación de personal especializado.
La imagen corporativa que ya es parte de la librería se repitió en este local, salvo casos específicos. Se agregó la cafetería Damiani para completar una idea que se viene plasmando durante los dos últimos años, la de incorporar el café a la lectura, que ha probado su éxito. Si bien en otros locales de Yenny la cafetería se integra a la misma librería, en este caso, por la noche, al cierre del shopping, se baja la cortina que conecta librería y café, independizándolos de modo que éste continúa atendiendo hasta la madrugada.
Otros aspectos por destacar en este local son la iluminación, los alfombrados y los cielos rasos modulares, todo de fabricación nacional y especialmente estudiado en conjunto por proyectistas y proveedores.
Materiales nacionales
Reemplazan con éxito a los importados
La más reciente sede de Yenny-El Ateneo, en el shopping Alto Palermo, contó con proyecto y dirección de obra del arquitecto Fernando Manzone y construcción de Spotti-Casas ingenieros SRL. Es una de las sedes de mayor superficie de la cadena, con un área total de 850 m2, a la que se suma la de la cafetería Damiani, con 184 m2, integrada en local adyacente con posibilidad de separación de acuerdo con los horarios de uso. Todo el equipamiento de la obra, en respuesta a los cambios económicos resultados del fin de la convertibilidad que convirtió a lo importado en casi inaccesible, es de producción nacional. Así, se estudió una línea de iluminación producida por Lafonier’s, de alta calidad con bajo consumo y precios de reposición competitivos. En cuanto a las alfombras, con Karavell se lograron productos que mantienen l a imagen corporativa de la cadena. También fueron proveedores Azzaro y Asociados en aire acondicionado y Mega Cristal en vidrios.



