La batalla de las pick ups: cuáles son las que llegan y todos los datos sobre el segmento

Decir que el segmento de las pick ups es uno de los más pujantes de los últimos años es una obviedad: basta sacar la lupa y analizar lo que va de 2022 para confirmar que las “chatas” representaron, hasta agosto, más del 20% del mercado local: uno de cada cinco autos que se vendieron en el país fueron pick ups. Pero más allá de su buen pasar, vale la pena recordar que la Argentina es un polo productor de pick ups por excelencia: en Buenos Aires se fabrican las Ford Ranger, Volkswagen Amarok (en Pacheco ambas) y la Toyota Hilux (en Zárate), y en Córdoba las Nissan Frontier y Renault Alaskan.

En este contexto, las marcas pusieron el ojo en el país y en la región y saben que, para aumentar el volumen, una de las fórmulas predilectas es poner en cancha un vehículo comercial ligero.

Por eso en los últimos años el mercado se amplió con la llegada de las Fiat Toro y Renault Oroch, dos productos que llegaron para achicar la brecha entre las chicas (Fiat Strada, Chevrolet Montana y Peugeot Hoggar, por mencionar algunos ejemplos) y las medianas.

Con menos de cinco metros y una capacidad de carga entre 600 y 1.000 kilos, el segmento fue ganando terreno por su versatilidad e incluso recibió hace algunos meses a la Ford Maverick, que con muchísimas virtudes se coló en la conversación.

Qué hay

A las bondades del segmento se le sumó un condimento extra: al ser consideradas vehículos comerciales (de trabajo), no tributan el denominado impuesto “al lujo” lo cual les da un plus de competitividad respecto a otros modelos.

En lo que va del año (incluyendo agosto) la Toyota Hilux, una eterna referente del segmento, es la más elegida por los argentinos: lleva vendidas 16.599 unidades aunque seguida muy de cerca por la Volkswagen Amarok, con 14.516. El producto de Volkswagen logró capturar el segundo lugar tras 12 años en el mercado y en 2021 quedó a algo más de 9000 unidades de la Hilux, una brecha que en 2022 podría ser menor.

El producto de Volkswagen desplazó del segundo lugar a otra histórica del segmento: la Ford Ranger, que lleva vendidas 8306 unidades este año. Y aquí se da una particularidad, porque a nivel mundial Volkswagen y Ford se pusieron de acuerdo para fabricar en conjunto la futura generación de ambos productos con una plataforma común. La asociación ya dio sus primeros frutos (ya se presentaron las Amarok y Ranger 2023) pero, paradójicamente, hubo una región donde el binomio no funcionó: Sudamérica. Ambas marcas producen las pick ups en líneas de montaje vecinas, pero no hubo “fumata blanca” y cada una seguirá su camino en nuestra región: Ford confirmó que fabricará la nueva generación de Ranger (la producción arranca en 2023, tras una inversión de US$580 millones para renovar casi por completo la planta de Pacheco) mientras que Volkswagen prometió una actualización de la Amarok, aunque diferente a la flamante generación global que fue presentada hace menos de dos meses en Sudáfrica.

De Ranger para abajo viene un pelotón de “chatas” abroqueladas entre 5000 y 3000 unidades patentadas pero ya empiezan a asomar los segmentos compactas y chicas. Un escalón por debajo del producto del óvalo se encuentra la Nissan Frontier, que presentó su primera actualización en mayo. El modelo fabricado en Córdoba acumula 4999 ejemplares patentados en lo que va del año y le saca casi 2000 a su inmediata perseguidora, la compacta Fiat Toro, de origen brasileño.

Con 3343 patentamientos, el modelo de Stellantis mantiene su buen andar desde que arribó al país hace algo más de cinco años. Además, es otra que hace unos meses se actualizó, manteniendo sus virtudes y mejorando equipamiento, motores y seguridad. A apenas 269 (3074) quedó la Renault Alaskan, que viene mejorando sus cifras mes a mes y a la que le viene pisando los talones la Fiat Strada (3033), un clásico de clásicos que en plena pandemia pegó un salto de generación que también la mejoró sustancialmente y que, dicho sea de paso, resiste el embate de las modas, las crisis y la competencia.

Ford logró colar uno de sus más recientes lanzamientos: la Maverick. Con Toro entre ceja y ceja, la pick up que llega proveniente de México está firmando un 2022 muy bueno con 2036 unidades registradas.

El registro de las más vendidas lo cierra la Chevrolet S10 (1916), que por disponibilidad (brasileña ella) sufre la falta de stock y no le permite ser competitiva, algo injusto teniendo en cuenta que también durante la pandemia recibió una interesante actualización y le sobra producto.

Qué viene

Pese al contexto, las automotrices saben que el mercado “es por acá”. La falta de previsibilidad es importante pero con el buen andar de la silueta hay varias pick ups en el horizonte, ya sea confirmadas o con fuertes intenciones.

La que está al caer es la Chevrolet Montana, un nombre que conocido porque supo desenvolverse en el segmento chico (plataforma Agile) aunque para esta nueva generación crecerá: utilizará la plataforma Tracker para hacerle frente a Toro, Maverick y Oroch, otro producto que sufre la falta de stock pero que recientemente se renovó y en Renault Argentina apuestan a que, solución mediante, vuelva a cobrar protagonismo en esa franja del mercado.

Otra que está confirmada para la Argentina es la Peugeot Landtrek. La marca francesa se asoció con la china Changan para subirse sin dilaciones al segmento mediano con un producto ya desarrollado y con el que quiere meterse en la conversación. Se la espera para 2023.

Dentro del mundo Stellantis, RAM, prácticamente sinónimo de full size pese al fuerte embate de la línea F-150 de Ford, avivará la gama de la 1500 con versiones especiales. ¿Y la TRX? Es muy pero muy difícil que la opción más radical aterrice en la Argentina aunque en la filial tienen muchas ganas de traerla. Y hablando de pick up grandes, Chevrolet acelerará para traer la Silverado, una cuenta pendiente.

Hyundai, algo complicada por ser netamente importadora, sigue coqueteando en redes con la Santa Cruz, otra compacta que por diseño y virtudes andaría, en los papeles, muy bien en el mercado local. Pese al anhelo, con este contexto, en el mejor de los casos sería un vehículo casi de nicho. Por último, uno de los lanzamientos del año que viene será la nueva generación de la Ford Ranger, ya mencionada más arriba.

Así las cosas, con el juego completamente abierto pero con una coyuntura que complica pensar en importar, las marcas apuestan -y lo seguirán haciendo por un tiempo- a inyectar en el mercado nuevas pick ups, una silueta que pasó de ser un vehículo netamente laboral a una opción versátil, habitable y seguro para el día a día.