Mientras los trabajos de limpieza se encuentran en su etapa final, la tormenta de la madrugada provocó más daños en la ciudad que analiza cambiar las tendencias de la poda para prevenir este tipo de eventos
- 4 minutos de lectura'
A un mes del intenso temporal que provocó serios destrozos en la Ciudad de Buenos Aires, con árboles caídos, daños en viviendas y automóviles, la lluvia de anoche también tuvo consecuencias diversas, cuando aún no finalizó el operativo de limpieza en los barrios más afectados por la tormenta del 17 de diciembre.
Durante la madrugada de hoy una rama de gran porte cayó sobre un auto y una camioneta en la calle La Pampa, entre Artilleros y Cazadores, lo que causó numerosos daños, principalmente en el Peugeot blanco estacionado que con el techo terminó amortiguando el impacto de las grandes ramas. La camioneta gris, de marca Volkswagen, sufrió daños menores, aunque igual terminó sepultada bajo las hojas y las ramas más finas. El desprendimiento se produjo desde un árbol que se encuentra en una propiedad privada.
Los primeros trabajos de las cuadrillas porteñas en el lugar, en pleno barrio de Belgrano, priorizaron garantizar la seguridad de los peatones y el resto de quienes circularon por allí. Luego consistieron en tratar de liberar a los automóviles con maquinaria pesada y, en simultáneo, verificar si la caída se trató del efecto de la tormenta de hace un mes o es un caso aislado como suelen ocurrir por diferentes situaciones. Los restos de la rama habían sido retirados durante las primeras horas de la tarde.
El fin de semana pasado el jefe de Gobierno, Jorge Macri, confirmó que solo restaba retirar “el 10% de los árboles y las ramas caídas” del fenómeno que hizo colapsar a parte de la ciudad el 17 de diciembre pasado. Según las estimaciones oficiales aquel temporal afectó a unos 5.000 ejemplares y al menos 3.000 en forma grave, con 958 caídos o con desprendimientos de grandes ramas. Para terminar el operativo de limpieza y recolección de restos siguen trabajando 45 cuadrillas.
“Nos encontramos con estas situaciones tan complejas. Esto fue casi un efecto tornado porque hay árboles que cayeron en un sentido, otros en otro. Las situaciones complejas son estas, con árboles que se han quebrado, pero que todavía están arriba, entonces no es un árbol que está en el piso y uno lo va trozando, sino es un árbol que hay que ir cortándolo, vigilar la caída y controlar otros factores. Es muy complejo, es una situación muy difícil”, detalló Macri.
“Nos tocó esta tormenta combinada de agua y viento, con lo cual es una doble presión sobre el árbol, porque no es solo el viento, sino que el agua que cae afecta al árbol”, agregó el jefe de Gobierno en su visita al Parque 3 de Febrero donde cayeron 105 árboles.
Sistema de poda, en análisis
Por su parte, el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana se encuentra elaborando un plan detallado de remediación de las especies perdidas teniendo en cuenta, tipo de especie, mejor época del año para el plantado y procesos de revisión, análisis y balanceo-compensación de árboles dañados.
Según pudo saber LA NACION, se está trabajando en una nueva estrategia para realizar el mantenimiento de cada árbol en particular, no centrándose en las especies en general. Es decir, un plan más quirúrgico, de mayor precisión para modificar las tendencias de poda, una variable que podría haber sido un agravante en la tormenta de diciembre.
Las condiciones climáticas de esa madrugada terminaron afectando a 178 de los 681 espacios verdes (plazas y parques) que tiene la ciudad, todos ya se encuentran habilitados. Aún quedan otros espacios verdes, como los de Facultad de Agronomía, con muchos árboles y ramas caídas que están siendo retirados, pero allí la ciudad no tiene jurisdicción al tratarse de un predio de la Universidad de Buenos Aires (UBA). En todos los casos las lluvias y las tormentas que llegaron después del temporal afectaron los trabajos y provocó retrasos.
Desde las primeras horas de comenzada la feroz tormenta la Ciudad, en la madrugada del 17 del mes pasado, se realizó un seguimiento particular de cada reclamo reportado a través del Centro Único de Coordinación y Control, donde se recibieron 11.446 llamadas.
Hasta el momento ingresaron más de 1.869.000 kilos de residuos forestales a la planta de tratamiento de residuos forestales en el Centro de Reciclaje, ubicado en Villa Soldati, que serán utilizados como compost.
Villa Pueyrredón, Villa Devoto, Agronomía, Palermo, Villa Santa Rita y Villa Urquiza fueron los barrios más afectados por la tormenta y donde hasta el fin de semana se seguían viendo ramas o trozos de troncos amontonados en las veredas. Incluso, en algunas esquinas, las ramas se apilaron durante semanas en las calles junto con restos de mampostería, tanques de agua y otros elementos que volaron por los fuertes vientos con ráfagas superiores a los 100 km/h.
LA NACION