Berni cuestionó la habilitación del local

El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, atacó ayer implícitamente al gobierno de la ciudad al denunciar que el depósito de Iron Mountain incendiado en Barracas y su sistema contra el fuego estaban mal habilitados. Solicitó que se investigue "por qué un edificio que albergaba tantos papeles poseía una estructura que evidentemente no era la correcta" para funcionar en esa actividad.

Lo hizo poco antes de que se confirmara la muerte de la décima víctima del siniestro, el bombero Facundo Ambrosi, que estaba internado en grave estado desde el día del incendio y posterior derrumbe, el 5 de este mes. Ambrosi se sumó a otros nueve bomberos y dos empleados de Defensa Civil fallecidos en el trágico episodio.

Voceros de la Agencia Gubernamental de Control (AGC), el organismo encargado de habilitar y fiscalizar las actividades comerciales en la Capital, dijeron a LA NACION que no responderían a las acusaciones de Berni porque toda la documentación referente al galpón de Iron Mountain ya había sido remitida a la fiscalía a cargo del caso.

No obstante, recordaron que la habilitación fue aprobada por una gestión anterior, la del ex jefe de gobierno Jorge Telerman, aunque en los controles posteriores al lugar no fueron halladas irregularidades en las instalaciones. La última inspección en el depósito de la calle Azara 1245 fue realizada en julio de 2012, pese a que debería haberse respetado una frecuencia anual.

Ayer, la rigurosidad de los controles al galpón de Iron Mountain fue puesta en duda por Berni. En declaraciones publicadas por el portal Infonews, el funcionario nacional opinó que el local "no debería haber estado habilitado nunca para semejante carga térmica" y consideró que "si bien fallaron los rociadores, [el galpón] no tenía un sistema de precaución pasiva que funcionara".

En ese sentido, sostuvo: "Hay que investigar la habilitación del sistema de incendios". Berni volvió a mencionar la posibilidad de que se hubiera tratado de un siniestro intencional. "No podemos descartar ninguna hipótesis", destacó.

La posibilidad del siniestro intencional también es impulsada por el representante legal de la familia de Pedro Baricolo, uno de los empleados de Defensa Civil porteña fallecidos en el derrumbe. Según el abogado Miguel Ángel Arce Aggeo, "las cámaras del interior del depósito revelaron la existencia de hasta cinco focos simultáneos, provocados con toda la intención de causar un daño grave".

Ayer, la jueza Laura Bruniard -transitoriamente a cargo del Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 18- rechazó el pedido de Arce Aggeo para constituirse como parte querellante en la investigación.

En tanto, mediante un comunicado oficial, la fiscalía interviniente aclaró que "todavía no hay certezas sobre cómo se originó el fuego", ya que la investigación apenas cuenta con "resultados parciales" de uno de los peritajes técnicos solicitados. "Se debe aguardar el informe completo para obtener mayores precisiones", se explicó.

La fiscal Marcela Sánchez continúa analizando la documentación remitida por diversas áreas del gobierno porteño sobre la habilitación y los controles de las instalaciones, al tiempo que requirió la citación de nuevos testigos para impulsar la causa.

• Facundo Ambrosi
  
  Bombero voluntario
  
  De 25 años, trabajaba en el cuartel de Vuelta de Rocha. Comenzó a trabajar en La Boca a los 13 años. La caída del muro que mató a siete bomberos y a dos rescatistas le causó fracturas en ambas piernas, la cadera y el brazo derechos, y rotura de costillas

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