Conflicto, tensión y amenazas de huelga

Una nueva amenaza de paro en la línea B de subtes fue realizada ayer por representantes de los trabajadores, aunque anoche la medida de fuerza quedó supeditada al resultado de la audiencia que los delegados mantendrán al mediodía con la Subsecretaría de Trabajo de la ciudad.

En la víspera, el delegado Claudio Dellecarbonara había anunciado que, durante el día, se concretarían asambleas entre los empleados para votar la posible concreción de una huelga en el ramal que une Leandro N. Alem y Juan Manuel de Rosas.

Por la tarde, confirmó la realización de la medida de fuerza y explicó que obedecía a las sanciones, descuentos de haberes y causas penales abiertas en su contra.

"Los trabajadores protestaremos mañana [por hoy] con un paro ante la persecución que está montando la empresa Metrovías, con descuentos de haberes, sanciones y causas penales por reclamar ante la falta de inversión en mantenimiento que tiene la línea", dijo Dellecarbonara.

Indicó que muchos trabajadores "fueron sancionados con multas de hasta 50.000 pesos por haber hecho un cierre de molinetes como alternativa a un paro" para no afectar directamente a los usuarios. "Pero ahora nos sancionan, nos abren causas judiciales y nos descuentan haberes por haber cerrado los molinetes", destacó Dellecarbonara.

Además, sostuvo: "Nos sancionan por no cumplir horarios de trabajo y nosotros entendemos que son provocaciones de Metrovías, ya que son completamente injustificadas, al tiempo que no nos garantiza los elementos de seguridad indispensables para trabajar".

Fuentes de Metrovías recordaron que, en los últimos meses, la liberación de los molinetes comenzó a ser considerada una contravención y, por lo tanto, es la Justicia del fuero respectivo la que impone las multas. Respecto a otras sanciones aplicadas a los trabajadores, recordaron que el 31 de diciembre, durante una inspección de Subterráneos de Buenos Aires (que supervisa a Metrovías) se constató que un empleado no estaba utilizando los elementos de seguridad entregados por la empresa, por lo que se lo suspendió un día.

Para evitar trastornos a los pasajeros, el subsecretario de Trabajo porteño, Ezequiel Sabor, convocó a una audiencia de conciliación para las 13. Voceros de Dellecarbonara dijeron que el paro quedaba suspendido, aunque podría realizarse mañana si naufraga la reunión.