Jaime no irá más al juicio por Once porque es "caro" viajar

El tribunal que juzga a los 29 acusados por la tragedia de Once autorizó ayer al ex secretario de Transporte de la Nación Ricardo Jaime, al ex interventor de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) Pedro Ochoa Romero y a Mario Cirigliano, presidente de Cometrans, a dejar de concurrir a las audiencias del debate.

Las defensas de Jaime y de Ochoa Romero habían solicitado al Tribunal Oral Federal N° 2 que sus defendidos fueran eximidos de concurrir al juicio mientras duren las audiencias testimoniales en curso. Según el documento leído ayer en el tribunal antes de comenzar la jornada, los abogados argumentaron que la presencia de ambos imputados en esta instancia resultaba "superflua" y que, en cambio, era muy alto el costo que debían enfrentar para venir a Buenos Aires dos veces por semana, ya que ambos viven en Córdoba.

Conocida la decisión de los magistrados, ninguno de los dos ex funcionarios estuvo presente ayer en los tribunales federales de Comodoro Py.

Dos de los jueces del tribunal, Jorge Alberto Tassara y Jorge Luciano Gorini, se manifestaron a favor del pedido de los imputados, aunque no hicieron lugar a los argumentos de la distancia, sino a una cuestión procesal del Código Penal. Los jueces explicaron que asistir al juicio en esta instancia es un derecho al que los acusados pueden renunciar, siempre y cuando estén presentes sus representantes legales.

En cambio, el juez Rodrigo Giménez Uriburu votó en disidencia. Consideró que "los argumentos de los imputados no son sustanciales" para justificar la ausencia y estimó que no está claro que el traslado entre Buenos Aires y Córdoba implicara un costo lo suficientemente grave, ya que las audiencias sólo se realizan los lunes y los martes.

Por mayoría, el tribunal aceptó el pedido de Jaime y de Ochoa Romero. Al finalizar la audiencia, a las 18.30, la defensa de Mario Cirigliano pidió también que su cliente fuera eximido de continuar asistiendo al debate y los jueces accedieron a concederle el mismo beneficio, también con el voto en disidencia de Giménez Uriburu.

Asimismo, los tres acusados deberán permanecer disponibles en caso de que se les ordene presentarse ante el tribunal, mientras que Jaime y Ochoa Romero deberán presentarse una vez por mes ante la justicia cordobesa.

Más testimonios

Luego de que el tribunal se pronunciara a favor del pedido de los imputados, se retomaron las audiencias testimoniales que estaban interrumpidas desde el 22 del mes pasado.

Ayer declararon otros siete pasajeros que se encontraban a bordo del tren que el 22 de febrero de 2012 chocó dentro de la terminal de Once, accidente en el que murieron 51 personas.

Los testigos describieron el estado de la formación Chapa 16 el día de la tragedia y respondieron preguntas de los abogados querellantes y de las defensas. Todos aseguraron que no recibieron asistencia alguna de la concesionaria TBA, la CNRT o el Estado nacional luego del choque, a pesar de que necesitaron asistencia psicológica, psiquiátrica y física.

"Era común que el tren viajara muy lleno, pero ese día había tanta gente que no se podía dar ni un paso. Cuando lo vi no me quise subir, pero la gente que esperaba en la estación me empujó y subí con ellos. Iba parada sin tener de dónde agarrarme, sostenida por la presión de otros pasajeros", dijo Marta Ruiz.

"Habitualmente viajábamos con las puertas abiertas, y veía pasajeros que se subían y bajaban por las ventanas, porque ésa era la única manera de viajar. Nadie de la empresa decía nada", señaló Cristina Sánchez Amaro.

Hoy, a las 10, continuará el debate, con la declaración de ocho testigos más.