Hormonas, otra vez en el banquillo
Los especialistas cuestionan que la investigación se realizó en mujeres mayores de 65 años
Cuando aún suenan los ecos de la suspensión del Women Health Initiative (WHI; Iniciativa de la Salud Femenina), estudio abruptamente concluido en julio del año pasado al hallarse que la toma oral de una combinación de hormonas producía más riesgos que beneficios en las mujeres menopáusicas, hoy se vuelve a poner en tela de juicio otra de las promesas de la terapia de reemplazo hormonal (TRH).
La revista de la Asociación Médica Estadounidense (JAMA, por sus siglas en inglés) publica en su edición del día que la asociación entre estrógenos y progestágenos duplica el riesgo de demencias en mujeres mayores de 65 años y que no previene el deterioro cognitivo moderado.
El estudio en cuestión, encabezado por Sally Shumaker, investigadora principal del Centro Médico Bautista de la Universidad Wake Forest, de Carolina del Norte (EE.UU.), es un subestudio del WHI y es parte a su vez de la Iniciativa de la Salud de la Memoria Femenina (WHIMS, según sus siglas en inglés). Se hizo entre 4532 mujeres de 39 centros clínicos durante casi cinco años.
La investigación fue financiada por Whyeth Pharmaceuticals -que provee las hormonas utilizadas en todos los estudios WHI- y el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de los Institutos Nacionales de la Salud de los EE.UU. (NIH).
"Estadísticamente es un trabajo intachable. Pero se hizo sobre señoras de más de 65 años... La terapia hormonal de reemplazo no es para mujeres mayores, y eso lo sabemos los ginecólogos de todo el mundo", afirmó por teléfono el profesor Néstor Siseles, delegado científico internacional de la Asociación Argentina para el Estudio del Climaterio (AAEC) a LA NACION (mientras lamentaba que la grúa se hubiera llevado su auto cuando atendía una urgencia).
Si no es novedad que la TRH no se adecua al perfil de mujeres grandes, ¿por qué un organismo como el NIH realizó el estudio? "Mire, a estas alturas, es lo mismo que pretender saber por qué EE.UU. decidió invadir Irak o Afganistán", bromeó Siseles.
Mentes que brillan
Divididas en dos grupos, algunas mujeres recibieron dosis orales de 0,625 miligramos diarios de estrógeno equino más 2,5 miligramos de acetato de medroxiprogesterona, una combinación hormonal comercializada como Prempro (Premel en nuestro país). El otro grupo tomó placebo.
El trabajo, iniciado hace unos siete años, mostró ahora que había un aumento de las demencias y que el tratamiento no evitaba el deterioro cognitivo leve.
Las demencias implican una disminución de la memoria, la capacidad de pensamiento y de juicio crítico. La forma más común que se halló en las mujeres estudiadas fue la Enfermedad de Alzheimer, seguida de las de origen vascular. El trabajo indicó un riesgo aumentado de 23 casos por 10.000 por año entre las mujeres que tomaron hormonas (ver infografía).
"Todavía no está demostrada en forma incontrovertible la utilidad de la TRH para prevenir demencias -agregó Siseles, que será el presidente del Congreso Mundial de Menopausia, a realizarse en Buenos Aires en 2005-. Pero los resultados preliminares de los estudios que conduce el neurólogo de los EE.UU Victor Henderson anticipan que el reemplazo hormonal debe ser utilizado 10 años antes de la aparición de los síntomas preclínicos de las demencias, es decir, entre los 50 y los 55 años, la etapa en que se indica actualmente este tratamiento."
Es por estos resultados, que anticipan que el reemplazo hormonal promete bondades administrado en los años posteriores inmediatos del cese de la menstruación, que la doctora Clelia Magaril, jefa de la Sección Climaterio de la División de Ginecología del hospital Ramos Mejía, se mostró sorprendida con las conclusiones del WHIMS.
"De todos modos -dijo Magaril- estos resultados no defenestran la terapia de reemplazo hormonal: sólo indican qué ocurrió con esta combinación de hormonas en mujeres mayores. Habrá que ver a la luz de otros estudios, incluyendo drogas que se comportan como hormonas según el tejido específico donde actúan."
En tanto, el doctor Mario D´Alessandro, director médico del Laboratorio Wyeth, dijo que "en la Argentina el 93% de las mujeres en tratamiento tiene entre 50 y 60 años, y sigue la terapia un promedio de siete meses, para los síntomas menopáusicos que, contra lo que se cree, no son superficiales porque afectan notablemente la calidad de vida además de producir daño neuronal, como mostraron estudios sobre qué pasa en el cerebro durante los sofocos o calores, cuando disminuye el aporte de oxígeno."
Para D´Alessandro, "el riesgo relativo de demencia es del 100%, es decir, el doble, pero en términos absolutos esto significa que hay siete casos adicionales por cada 10.000 mujeres que usaron la terapia", cifra que no consideró especialmente elevada.
D´Alessandro aseguró que la TRH está indicada en mujeres más jóvenes, aunque recomendó consultar en cada caso.
El director médico del laboratorio agregó que la FDA (entidad de los EE.UU. que administra y fiscaliza drogas y alimentos) acaba de aprobar una versión de la misma combinación de hormonas utilizada en el estudio WHI, pero en baja dosis.
"La idea es obtener el mejor resultado con la mínima dosis posible -dijo el doctor D´Alessandro-. ¿Si se comercializará en la Argentina? Esto no lo sé. Yo manejo la parte médica. La oportunidad del lanzamiento de un producto depende del marketing."