Aclara el Vaticano el tema del preservativo
ROMA (De nuestra corresponsal).- Un mes después de la supuesta apertura manifestada por el Papa respecto del uso del preservativo en casos extremos para evitar propagar el sida -realizada en el libro Luz del mundo -, el Vaticano aclaró ayer que las palabras de Benedicto XVI "no modifican ni la doctrina moral ni la praxis pastoral de la Iglesia".
Un comunicado de la Congregación de la Doctrina de la Fe, que dirige el cardenal norteamericano William Levada, denunció que en ocasión de la publicación de Luz del mundo se difundieron "interpretaciones incorrectas" que crearon "confusión" sobre la postura de la Iglesia Católica acerca de algunas cuestiones de moral sexual. "El pensamiento del Papa se ha instrumentalizado", acusó.
El comunicado reafirmó que la Iglesia Católica prohíbe el uso del preservativo como método para impedir la procreación, citando la encíclica Humanea Vitae, de Pablo VI. Y subrayó que el Santo Padre en el libro se refería al caso completamente diferente de la prostitución, "que la doctrina cristiana ha considerado siempre gravemente inmoral".
"El Papa afirma claramente que los profilácticos no son «una solución real y moral» del problema del sida, y también que la «mera fijación en el preservativo significa una banalización de la sexualidad». Por otra parte, el Papa pone de relieve que recurrir al profiláctico con «la intención de reducir el peligro de contagio es un primer paso en el camino hacia una sexualidad vivida en forma diferente, hacia una sexualidad más humana»", puntualizó.
El comunicado -que según expertos fue fruto de presiones de sectores conservadores- finalmente precisó que tampoco es correcta la interpretación de la teoría del mal menor. "No es lícito querer una acción que es mala por su objeto, aunque se trate de un mal menor. El Santo Padre no ha dicho, como alguno ha sostenido, que la prostitución con el recurso al profiláctico pueda ser una opción lícita en cuanto mal menor."