“La Mujer Gato”: Eduardo Costantini logró otro récord para Leonora Carrington al pagar US$11,38 millones por una escultura
Es el precio más alto alcanzado por una escultura de la artista surrealista radicada en México; en mayo, en otra subasta en Sotheby’s, el fundador del Malba había comprado “Las distracciones de Dagoberto” por US$28,4 millones, récord absoluto para una obra suya
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Eduardo Costantini logró otro récord para Leonora Carrington al comprar hoy La Grande Dame (La Mujer Gato), de más de dos metros de alto. Tras una oferta realizada por teléfono mientras competía con otros cuatro ofertantes cuando era rematada en Sotheby’s de Nueva York, el fundador del Malba pagó US$11,38 millones, la cifra más alta registrada en subastas por una escultura de la artista surrealista nacida en Gran Bretaña y radicada en México. En mayo había comprado Las distracciones de Dagoberto por US$28,4 millones, cifra que marcó un récord absoluto para Carrington; desde agosto, esta obra se exhibe en una sala especial el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires.
Realizada en 1951 en colaboración con José Horna, un talentoso carpintero y esposo de su amiga Kati Horna, la obra apareció en subasta por primera vez en casi 30 años -en 1994, se vendió también en Sotheby’s por 299.500 dólares- y es una de las obras más valiosas de Carrington hasta la fecha. Permaneció durante mucho tiempo en la colección del histórico mecenas surrealista Edward James. Desde entonces ocupó un lugar destacado en exposiciones de la Serpentine Gallery y Tate Modern de Londres, el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York y la Colección Peggy Guggenheim en Venecia, entre otras instituciones.
Con rostro de mariposa y brazos que parecen estar en posición de ballet, reúne iconografías de lo divino femenino de todo el mundo, con referencias que van desde los antiguos egipcios y celtas al México moderno. “Hace referencia a Bastet, antigua diosa egipcia de la protección, el placer y portadora de buena salud, que es a menudo representada como un gato, haciéndose eco de la grandeza de estatuas del antiguo Egipto con su imponente tamaño, estilización geométrica y simbolismo vívido”, señaló la casa de subastas.
“Sintetiza diversas iconografías de lo divino femenino en una dimensión humana. Crea una profunda sensación de presencia sobrenatural, actuando como un portal surrealista que transporta al espectador tanto física como psíquicamente a su maravilloso universo”, observó Anna Di Stasi, responsable de Arte Latinoamericano de Sotheby’s, antes de celebrar la venta desde su cuenta de Instagram: “¡La escultura más extraordinaria de Carrington se va al mejor hogar en América Latina! Felicitaciones a su nuevo dueño y al increíble grupo que hizo que esto ocurriera... Otra vez!”
“A esta obra y a Las distracciones de Dagoberto las conocí en el Guggenheim de Venecia, en una muestra en 2022 dijo a LA NACION Costantini, que las adquirió para su colección personal pero las prestará al Malba, donde su acervo dialoga con el del museo en la muestra Tercer ojo-. Pertenecían al mismo propietario. Cuando las obras están en manos de personas hay situaciones económicas o familiares o sucesiones, el paso del tiempo… La situación puede cambiar. Con esto creo que logramos una muy buena representación de Leonora, con sus mejores obras en pintura y escultura. Si le agregás las tres que tenemos de Remedio Varo y fotografías que tenemos de Kati Horna, a Frida, a Maria Martins, a Tarsila… La colección realmente va teniendo una potencia de alcance internacional. Ves, además, la integración en los remates del arte latinoamericano y el arte moderno internacional, y fijate que Leonora se vende al lado de Monet, de Picasso… Y logra precios incluso superiores”.
En el mismo remate Los Caminos tortuosos, de Varo, se vendió por dos millones de dólares, un precio récord para una obra suya en papel. Y el Templo de la Palabra, de Carrington, alcanzó los 4,56 millones de dólares, precio que la ubica en el tercer puesto de los más altos logrados por una obra de la artista. “En los últimos años el trabajo de Carrington, como el de muchas mujeres artistas de su generación, finalmente está experimentando un crecimiento en el mercado a niveles paralelos a sus pares masculinos”, destacó Sotheby’s, al señalar que el récord anterior para la artista en subastas antes de la venta de Las distracciones de Dagoberto era de 3,3 millones de dólares, establecido hace dos años. Se convirtió así en “la artista femenina nacida en Gran Bretaña más valiosa, así como una de las artistas surrealistas con mayores ventas de la historia”.
“Carrington ha sido durante mucho tiempo una de las mayores exponentes del movimiento surrealista -opinó Julian Dawes, director de arte impresionista y moderno de Sotheby’s América-. Y ahora, con estos dos récords consecutivos conseguidos en temporadas sucesivas en Sotheby’s, su estrella brilla como corresponde. La Grande Dame es sin duda la mejor de las esculturas de Leonora Carrington, una verdadera encarnación de su imaginación y maestría ilimitadas. Todos estábamos emocionados de ver su calidad reconocida por tantos postores decididos esta noche, y por saber que la escultura ahora se ubicará junto a Les Distractions de Dagobert, que batió su récord en Sotheby’s en mayo”.
Y esto no es todo. La semana de subastas en Nueva York comenzó con la venta varias obras importantes de la colección de Sydell Miller, conocida como la “reina de la industria de la belleza” y fallecida en marzo último; entre ellas, Ninfas, pintura de Monet vendida por 65,5 millones de dólares; La estatuaria, de Pablo Picasso, vendida por 24,8 millones, y Óvalo blanco, de Wassily Kandinsky, por 21,61 millones. Los remates volverán a dar de qué hablar este miércoles, cuando se remate en Sotheby’s Comediante, la célebre banana de Maurizio Cattelan, con un valor estimado entre un millón y un millón y medio de dólares.
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