Una versión del tiempo convulso de la dictadura escrita desde la cárcel

Ante un auditorio colmado por algo más de 250 personas, se presentó ayer en el Pabellón Amarillo de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires el volumen Crónica de una guerra negada, escrito por el ex teniente coronel Jorge Héctor Di Pasquale, quien actualmente permanece preso en Campo de Mayo, condenado por delitos de lesa humanidad.El volumen procura ser -se señaló- un repaso de "la guerra revolucionaria en Argentina 1955-1990". Estuvieron, en representación del autor, el coronel Guillermo Viola, el escritor José D'Angelo, el teniente (R) Pedro Güiraldes y el periodista Ceferino Reato.Viola tuvo a su cargo la coordinación de la actividad, que comenzó con un minuto de silencio en homenaje "a todos nuestros muertos". Estaban en el auditorio decenas de camaradas del autor y otros miembros de la familia militar, entre ellos, Cecilia Pando.

En el comienzo del acto, se proyectó un video que buscó "sintetizar" las acciones del movimiento guerrillero durante los años 70 con alusiones fuertemente críticas a algunos líderes de ese tiempo histórico convulso, como Fidel Castro, el Che Guevara, Mao Tsé-tung y Juan Domingo Perón. El audiovisual incluyó imágenes igualmente críticas acerca de las organizaciones armadas.

José D'Angelo destacó "el rigor científico" de un libro que consideró "encomiable e imprescindible", y consideró que la obra "se situará en un sitial de privilegio" dentro de la bibliografía de la historia argentina. El escritor añadió que el trabajo servirá como contrapunto "a la manipulación de la Justicia en el tratamiento de los llamados delitos de lesa humanidad". Pedro Güiraldes agregó que se trata de un libro "de consumo obligatorio, ya que habla por sí mismo", y se refirió al contexto político actual: "Los 70 siguen proyectando su sombra paralizante", señaló, y criticó leyes que juzgó "vergonzosas".

El acto concluyó con la emisión de un audio en el que el autor confió que empezó a escribir el libro en el momento en que quiso explicarles a sus hijos las razones por las que estaba detenido.

"Tengo que aclararles que tanto la prisión como las enfermedades y los agravios que hemos recibido todos los detenidos por estos supuestos delitos de lesa humanidad, y particularmente nuestras familias, no me van a amilanar -señaló-. Y voy a seguir luchando para que se sepa la verdad de lo ocurrido, como también lo hacen mis compañeros en prisión. El objetivo del trabajo que se presenta hoy -concluyó- es evitar que se siga tergiversando la historia".