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Los boxeadores Deontay Wilder y Tyson Fury quisieron adelantar la pelea que se disputará el sábado en el MGM de Las Vegas por el título mundial de los pesos pesados y en plena conferencia de prensa estuvieron a los empujones ante la mirada de todos.
Durante la tensa rueda con los medios, el personal de seguridad tuvo que contener varias veces al estadounidense Wilder y el inglés Fury para evitar que la situación se saliera de control.
A pesar de los recaudos, la tensión continuó en aumento. "Los dos estamos emocionalmente involucrados en esto", dijo Wilder. Además, agregó: "Ambos queremos dar lo mejor de nosotros, pero tengan por seguro que saldré con la mano en alto".
Fury no se quedó en silencio y le retrucó:"Él habla mucho, yo no, yo sólo sé hablar arriba del cuadrilátero y con mis puños le callaré la boca".
Wilder siguió: "No te atrevas a decir eso. No olvides nunca cuando te encontré, que estabas lleno de cocaína, que te ibas a suicidar. Así que nunca lo olvides. Te traje de vuelta al mundo del boxeo. Te di comida para tu familia al pelear contra ti, y lo estoy haciendo por segunda vez. Nunca lo olvides. Te traje al boxeo a lo grande. Te reté a que volvieras".
"Estás hablando mucha basura", fue la respuesta de Fury.
Su último enfrentamiento, hace 14 meses, terminó en empate. El sábado que viene, las palabras darán lugar a la acción y se sabrá quién es el nuevo campeón del mundo de los pesos pesados.