NBA maratónica: Detroit venció 147-144 a Chicago tras cuatro suplementarios

CHICAGO (DPA) - Chicago Bulls recibió anoche a Detroit Pistons en un épico partido que se transformó en el más largo de la NBA desde 2014. La victoria se la llevaron los visitantes por 147-144 luego de cuatro tiempos suplementarios.

La actuación de Andre Drummond, con 33 puntos y 21 rebotes, explican en buena medida que los Pistons terminaran imponiéndose, tras tres horas y 24 minutos de partido. "íGuau! No tengo palabras. Estoy más feliz que cansado", atinó a decir el pívot de Detroit luego del juego.

Ni los 43 puntos -récord personal- y ocho rebotes de Jimmy Buttler, ni los 30 puntos y 15 rebotes del español de Pau Gasol ni los 34 tantos de Derrick Rose fueron suficientes para que los Bulls prolongaran su racha de cuatro victorias consecutivas. "Perder así, tras cuatro prórrogas y en casa, es descorazonador", reconoció Gasol.

"Puede que para ustedes fuera divertido, para mí fue insoportable. Fue un partido épico" (Stan van Gundy, DT de los Pistons)

En la historia de Chicago, sólo había un precedente de un encuentro de cuatro prórrogas y se remontaba a 1984 ante Portland. En la de Detroit, ninguno. Pero a la hora de cerrar el partido, los visitantes tuvieron mayor porcentaje de efectividad y, sobre todo, a Reggie Jackson (31 tantos y 13 asistencias) decisivo. El ex armador de los Thunder apareció en el tercer tiempo suplementario para anotar 13 de los 20 puntos de los Pistons en este periodo, dar la réplica al extraordinario Buttler (17) y forzar el último y decisivo tiempo extra.

"Puede que para ustedes haya sido divertido, pero creo que para Fred (Hoiberg, DT de los Bulls) y para mí fue insoportable. Fue un partido épico", afirmó Stan van Gundy, entrenador de los Pistons, tras el histórico triunfo de su equipo.

Detroit ocupa ahora la octava plaza de la Conferencia Este con un balance de 16 victorias y 12 derrotas. La derrota hizo caer a los Bulls al tercer lugar de la conferencia con 15 y 9.

El partido más largo de la historia de la NBA se disputó en 1951 en la visita de los Indianapolis Olympians a los Rochester Royals. En un encuentro sin tiempo de posesión, el marcador terminó igualado en 65 y se definió tras seis prórrogas en las que se anotaron sólo 18 puntos en total: 2-2 (primera prórroga), 0-0 (segunda), 2-2 (tercera), 0-0 (cuarta), 4-4 (quinta) y 2-0 (última) para que los Olympians se llevaran la victoria por 75-73.

El resumen del partido

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