Chacarita - Atlanta, la Primera Nacional: rojas, patadas, la furia de Walter Erviti en un clásico por el que se esperó durante seis años

Mucha espera, casi un eternidad para volver a tener uno de los clásicos más viejos y calientes del fútbol argentino. Esperaron seis años para volver a estar frente a frente y regalaron un espectáculo cargado de emoción. Chacarita y Atlanta se quedaron con la escena en la primera fecha de la Zona A de la Primera Nacional. Un duelo que ganó el equipo de Villa Crespo por 1-0, pero que ofreció de todo: tarjetas rojas, piernas fuertes y la explosión del entrenador del conjunto bohemio: Walter Erviti.

Ignacio Colombini, a los 9 minutos del primer tiempo, fue el responsable de marcar el único tanto del juego. Un ataque por el sector izquierdo, un centro de Ramiro Fernández y el cabezazo de Colombini para el delirio del pueblo bohemio. Desde ese momento el juego se volvió un hervidero y el árbitro del partido Jorge Broggi nunca supo cómo controlar el juego brusco que se multiplicó minuto a minuto.

Tan descontrolado estaba el partido que ni las tres tarjetas rojas que mostró fueron suficientes para detener las entradas fuertísimas de los dos equipos. Atlanta fue el que más lo sufrió, porque antes del final del primer tiempo se fue expulsado Alejo Dramisino (por un golpe sobre Enzo Silcan, que también debió ser expulsado por ir con imprudencia a esa acción) y sobre el cuarto de hora de la segunda mitad, Valentín Perales, por exceso verbal, se fue directo a las duchas. El equipo de Villa Crespo jugó más de media hora con nueve hombres. Y como si fuese poco, comenzó el segundo tiempo sin su entrenador, porque fue expulsado por llegar un minuto y medio tarde tras el entretiempo.

Esa situación despertó la furia del DT de Atlanta, ya que cuando ingresó al campo de juego le pidió disculpas a los tres árbitros de la noche por su demora, pero Broggi, el juez principal, no dudó en expulsarlo. Las cámaras tomaron la salida del entrenador y se lo pudo ver que cuando dejaba la cancha, con aparente calma dice: “Qué lindo es el fútbol argentino...” Ahora bien, cuando ingresa a la zona de vestuarios se lo que completamente furioso: golpeó la puerta de ingreso con una patada y gritó “qué lindo es el fútbol argentino la c... de su madre. Ladrones h... de p...”.

Tras el partido Erviti declaró: “No voy en contra de la reglamentación, para nada. Nosotros calculamos dentro del vestuario y llegué bien, como tenía que llegar. Me parece que hay cosas que son innecesarias”, dijo en el programa de TyC Sports, Jugador 23.

Tras el partido Erviti declaró: “No voy en contra de la reglamentación, para nada. Nosotros calculamos dentro del vestuario y llegué bien, como tenía que llegar. Me parece que hay cosas que son innecesarias”, dijo en el programa de TyC Sports, Jugador 23.

Todo el segundo tiempo fue al límite los dos equipos tuvieron sus situaciones para marcar, Atlante aguantó los embates de Chacarita y tomó algo de aire cuando sobre el final del partido, cuando faltaban 7 minutos para el final, Broggi decidió expulsar a Gallegos, por tirar la pelota lejos y con evidentes gestos de fastidio.

Atlanta arrancó el torneo con una gran victoria en el clásico que volvió a disputarse luego de seis años y volvió a ganar en la cancha de Chacarita (la última victoria data de 2014 por 2-1), un reducto muy duro para el conjunto de Villa Crespo, y que en 46 partidos como visitante, los bohemios apenas acumulan 7 victorias.