El deporte argentino, a la deriva y sin respuestas tras la advertencia de la AMA

A dos días del primer ballotaje presidencial, el informe de la Agencia Mundial Antidoping (AMA), que afirma que la Argentina incumple con los códigos internacionales de antidoping, desnudó una serie de irregularidades en la Secretaría de Deporte de la Nación (SDN), que preside el medallista olímpico Carlos Espínola. En diálogo con LA NACION, Rob Koehler, Director Senior de la AMA, fue contundente: "La Argentina no está cumpliendo con los códigos internacionales de antidoping. Hasta ahora, tuvimos muchas promesas del gobierno, pero ninguna acción concreta". El organismo encargado de cumplir con los códigos internacionales de la AMA es la Comisión Nacional Antidopaje, creada por la ley N°26.912. La norma fue promulgada en diciembre de 2013 y dicho organismo, que depende de la Secretaría de Deporte, todavía no está en funciones. Este es uno de los puntos que la AMA le reclama a la Argentina. El otro es que se utilizaron laboratorios no acreditados para hacer controles antidoping.

Es decir, una norma promulgada hace dos años no está siendo cumplida. Espínola designó como funcionario encargado de la Comisión Nacional Antidopaje a Facundo Palma, quien es de extrema confianza del ex regatista y que fue Subsecretario de Turismo, Cultura y Deporte de la ciudad de Corrientes cuando Camau era intendente (ver página 11). Palma no acredita experiencia en el ámbito del antidoping. Otra de las funciones que ocupó en Corrientes fue la presidencia en la Federación de Comparsas y Agrupaciones Musicales (Facam). Actualmente, como Espínola trabajó intensamente en la campaña para ser senador por la provincia de Corrientes (escaño que finalmente consiguió), Palma ejercía como el secretario de Deporte de la Nación en los hechos, según distintas fuentes consultadas por LA NACION.

Ayer, este medio intentó comunicarse sin éxito con el funcionario correntino en reiteradas oportunidades. Tampoco respondieron los llamados ni Espínola ni el subsecretario de Deporte, Javier Conte. Justamente, anteayer, cuando se difundió el informe de la AMA, según pudo averiguar LA NACION, Conte trabajó hasta la medianoche en las oficinas del Cenard, visiblemente nervioso y de mal humor. Palma y Espínola no se encontraban en el edificio de Núñez. Desde su oficina, informaron que están de viaje en Corrientes.

Después de un grave conflicto con la AMA, la Secretaría de Deporte se encuentra en una extraña situación acéfala, sin su Secretario ni su principal asesor en funciones. Desde la SDN, señalaron que, por el caso con la AMA, había que comunicarse con el doctor Hugo Rodríguez Papini, responsable del laboratorio del Cenard, y quien anteayer ya le aclaró a LA NACION que "el cumplimiento de las normativas está a cargo de la Comisión Nacional Antidopaje".

Mientras tanto, desde el Ente Nacional de Alto Rendimiento (Enard) y el Comité Olímpico Argentino (COA) insistieron en que es la Secretaría de Deporte quien debiera hacerse cargo de la situación y de la creación de la Comisión Nacional Antidopaje. Las autoridades de ambas entidades prefirieron el silencio hasta que, al menos, la Secretaría no emita algún tipo de comunicado. De acuerdo con lo que establece la Ley de Control de Dopaje que se aprobó dos años atrás, el Comité Nacional Antidopaje debiera contar con dos representantes de la SDN y siete integrantes más, entre ellos un representante del COA. Hasta anoche, el Comité Olímpico no había sido consultado. Vale la pena recordar que la SDN y el COA son socios en el Enard, cuyo actual presidente es Espínola.

A este escenario de incertidumbre se suma un panorama aún de más dudas en cuanto al futuro. En primer lugar, las elecciones del domingo en las que se decidirá el nuevo presidente de la Argentina y que implicará un cambio de gobierno, más allá de quién sea el ganador. Y un segundo ingrediente: según la nueva Ley del Deporte, que crea el Instituto Nacional del Deporte y la Actividad Física, ente que funcionaría de manera autárquica y que reemplaza a la SDN, el presidente será designado por Cristina Fernández de Kirchner. El máximo dirigente del Instituto estará en su cargo por cuatro años, con opción de ser reelegido una vez. Y no puede ser removido por el Poder Ejecutivo. Sólo lo puede hacer la Consejo Nacional del Deporte y la Actividad Física, ente de cargos ad honorem creado en la nueva norma. Esto podría generar una extraña situación en la que el máximo dirigente del deporte argentino fuera de un signo político distinto a quien sea el presidente de la Nación. Esto último todavía se mantiene en un manto de dudas, dado que la nueva Ley del Deporte todavía no fue reglamentada y los funcionarios no fueron designados.

Las preguntas son muchas y las respuestas de los principales responsables del deporte argentino, inexistentes. ¿Está en marcha la creación de Comisión Nacional de Antidoping? ¿Quiénes serán los nueve integrantes ad honorem? ¿Existen los recursos? ¿Quién es el interlocutor ante la Agencia Mundial Antidoping? ¿Cómo regularizará la Argentina su situación? Son las mismas dudas que hasta ahora tuvo la AMA.

Camau Espínola, recientemente electo senador nacional por Corrientes y con la mente enfocada en ser gobernador de su provincia, fue un eximio navegante y cuatro veces medallista olímpico. Pero en su oficina del Cenard, donde ejerce como Secretario de Deporte de la Nación da la imagen de haber soltado el timón hace tiempo. Mientras, las preguntas siguen flotando.

jt