Agredieron a Bianchi en medio de un clima hostil

SAN PABLO (De un enviado especial).- Los más de 35.000 espectadores que esperaban por una victoria contundente de Palmeiras se desencajaron al ver cómo su equipo era desbordado por Boca. En la cancha, los xeneizes se imponían por 2 a 1 y el juez de línea Daniel Wilson le había anulado correctamente por off-side un tanto a los brasileños. Los ánimos se caldearon más. No les alcanzó a los hinchas de Palmeiras con agredir a los jugadores xeneizes con bolsas de orina cuando entraron en el campo de juego. Tenían algo guardado...

Por eso, se la agarraron primero con el juez de línea y después con Carlos Bianchi, uno de los personajes más insultados junto con Juan Román Riquelme por los simpatizantes locales. El DT observó la primera etapa desde el palco especial A junto con Roberto Digón, vicepresidente tercero de Boca, y los dirigentes Juan De Turris y Marcelo London, pero cuando finalizó el primer tiempo y el Virrey se dirigía al vestuario le tiraron un piedrazo que le produjo un corte en la cabeza de cinco centímetros .

¿Cómo fue? Bianchi salió del palco custodiado por dos policías, más Mario Torres, jefe de seguridad de Boca, y Juan De Turris. El DT primero recibió un proyectil en la pierna; tropezó en la galería que lo conduce al vestuario y se cayó. Ahí, los hinchas de Palmeiras se dieron cuenta de que se trataba de Bianchi y le tiraron de todo, incluso botellas de vidrio: lo bañaron en agua y le pegaron un piedrazo en la cabeza, lo que le produjo el corte. Lo llevaron a la rastra hasta el vestuario de Boca y allí lo reanimaron.

Carlos Ischia, mientras tanto, reclamaba a los cuatro vientos: ¿Cómo puede ser, viejo? ¿Después de todo lo que pasó y ponen a dos policías nada más? Por favor...". Desencajado, el ayudante de campo de Bianchi le pedía explicaciones al cuarto árbitro, sin encontrar respuestas.

Atendieron a Bianchi y regresó al palco para ver el segundo tiempo. Sufrió con el empate y con la definición por penales. Pero volvió a festejar.