El dolor en Progreso: "Creo que es lo que todos esperábamos"

SANTA FE.- El dolor se siente en Progreso, ese pequeño pueblo distante 76 kilómetros de esta capital, hacia el centro-norte. La confirmación de que el cuerpo hallado en el avión hundido en el fondo del Canal de la Mancha era de Emiliano Sala llegó a Progreso dos horas antes de que se hiciera pública. Fue cuando Darío, hermano del futbolista, que viajó hace una semana para unirse al "clan Sala" (madre, hermana y amigos), se comunicó con sus conocidos en el pueblo y les anunció la novedad. Lo reveló a LA NACION el presidente del club San Martín, Daniel Ribero, institución en la que se formó Emiliano antes de pasar por San Francisco, Córdoba, y luego viajar a Burdeos.

"Es lamentable. Es un poco duro lo que ahora sabemos, pero es la realidad. Creo que es lo que todos esperábamos: que frente a la tragedia pudiéramos recibir y sepultar su cuerpo en el pueblo que lo vio crecer, donde está su familia, donde viven todos sus amigos. Se terminó la incertidumbre. Ahora, a esperar. La familia decidirá los pasos que siguen, afrontando el dolor de lo sucedido", amplió Ribero.

El presidente anticipó que también el club de Progreso rendirá un homenaje al delantero. "Vamos a conversar de eso con los directivos y con la familia, cuando ellos estén de regreso y hayan realizado el duelo por esta irremediable pérdida", agregó Ribero.

El 22 de enero, día en el que se confirmó la desaparición del avión que trasladaba a Emiliano Sala (28 años) desde Nantes hacia Cardiff, comenzó en Progreso una vigilia, que fue más sentida cuando la familia superó el shock de la noticia y viajó, en tandas, a Gran Bretaña.

El cuerpo fue llevado a Portland en Dorset por el barco Geo Ocean III, y llevado en una camilla a una ambulancia, antes de ser trasladado al forense. A las pocas horas la policía local informó que el cadáver correspondía al futbolista argentino.