La Aprevide pediría dos fechas de suspensión para Racing por las cargadas

La fiesta por el descenso de Independiente podría salirle muy cara a Racing. Todo el cotillón, la marcha fúnebre por los altoparlantes del Cilindro, los ataúdes con el escudo de Independiente, el apagón en el entretiempo y la pirotecnia llevarían a la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide) a pedir una sanción de dos fechas para la cancha de Racing.

El organismo bonaerense responsable de la seguridad en los estadios analizó las evidencias provistas por los efectivos policiales encargados del operativo en la cancha el viernes pasado, en ocasión del partido frente a Racing. La primera conclusión que sacaron los funcionarios es que los ataúdes y las coronas fúnebres no se ingresaron antes del partido: ya estaban en el estadio.

La prueba complica a la dirigencia de la Academia, a la que responsabilizan por la propalación de la marcha fúnebre y el hit "Te vas", del cantante Américo, desde la voz del estadio. Además, la Aprevide tendrá en cuenta el apagón (¿intencional?) que sufrió el Cilindro de Avellaneda en el entretiempo, y que, curiosamente, fue solucionado cuando los equipos salían a la cancha.

En la Aprevide aseguran que ayer el club fue notificado de las actuaciones en su contra. Desde la dirigencia le confirmaron a canchallena.com que a las 18 de ayer arribó el documento a las oficinas de Avellaneda. El club tiene la obligación de presentar su descargo 72 horas después de que haber sido notificado, es decir, el tiempo se acaba el lunes próximo. Según se pudo reconstruir, la demora en el envío de los documentos a Racing (los incidentes se produjeron el viernes pasado) se debió a retrasos en el informe de los policías que estuvieron en el operativo policial en el Cilindro.

Más allá del descargo que elaboren los abogados y dirigentes de Racing, la Aprevide ya tiene decidido pedir la suspensión de la cancha para el comienzo del torneo Final. Si bien en los pasillos de la AFA se especulaba con un sanción sin precedente y prolongada (llegó a hablarse de seis partidos de castigo), el organismo bonaerense de seguridad pediría una suspensión de dos encuentros.

El cotejo frente a Unión, que terminó con una goleada 3 a 0 en favor de la Academia, tuvo un festejo que excedió por mucho a lo futbolístico. El público de la Academia celebró con cotillón rojo, fantasmas, ataúdes, coronas, velas, bombas de humo, marchas fúnebres y cargadas varias el descenso de su acérrimo rival, Independiente. Todos los asistentes al estadio sabían que el festejo estaba preparado y no había nada librado al azar.

Los antecedentes de los dirigentes de Racing tampoco ayudan: en ocasión del partido ante Boca, dos semanas antes del encuentro frente a los santafecinos, Leandro Rodríguez Hevia, secretario del club, fue demorado durante dos horas ya que en su automóvil se encontraron velas y disfraces para burlarse de Independiente.

Lo curioso es que en lo previo al partido, el organismo de seguridad bonaerense les había pedido a los dirigentes de Racing "llevar a cabo una campaña de concientización destinada a los socios y simpatizantes para evitar cualquier situación que pueda resultar disparadora de hechos de violencia".

Si bien en la agencia bonaeresne esperarán a ver qué dicen los dirigentes de la Academia, la suerte del Cilindro para los dos primeros partidos parece escrita, por lo que recién en el tercer encuentro como local los hinchas de Racing podrán ver a su equipo en Avellaneda. Todo, por cruzar un límite al celebrar el descenso de los Rojos.