La “palomita” de Stefanos Tsitsipas que hizo recordar a Boris Becker en el sensacional triunfo sobre Diego Schwartzman: así ganó un punto de oro

Fue un partido sensacional. Era de Stefanos Tsitsipas, que lo dejó escapar en la definición del segundo parcial. Se recuperó a lo grande Diego Schwartzman, enorme en el segundo set y a tiro del 5-0 en el tercero, el decisivo. Y, sin embargo, el triunfo se le escurrió de entre las manos en el Masters 1000 de Montecarlo.

El griego, uno de los mejores exponentes del tour, lo ganó con una energía pocas veces vista. Y cuando estuvo cerca de la definición, voló. Se lanzó en palomita, a lo Boris Becker, el alemán que dejó una huella imborrable entre los amantes del tenis, más allá de los serios problemas personales que hoy afronta.

La palomita del griego

Schwartzman, 16º en la clasificación mundial, tuvo contra las cuerdas a Tsitsipas, el campeón defensor en Mónaco, tercer favorito del torneo y 5º en el ranking de ATP, pero dejó pasar la oportunidad. En los cuartos de final, el tercer torneo de esa categoría e la temporada, Peque cayó por 6-2, 6-7 (3-7) y 6-4, en un partido en el que la mejor reacción fue la del griego, que llegó a estar 0-4 en el parcial definitivo.

Las voleas de Boris Becker

En las semifinales el ganador se medirá con el alemán Alexander Zverev, número 3 del mundo y segundo preclasificado, que dejó atrás al italiano Jannik Sinner (9º) por 7-5, 3-6 y 7-6 (7-5) luego de tres horas y cinco minutos. El otro finalista surgirá del enfrentamiento entre el español Alejandro Davidovich Fokina (46º), que llegó a esta instancia por primera vez, y el búlgaro Grigor Dimitrov (29º). “¡Perdón por haber ganado!”, dijo Zverev con cierta ironía al público, que lo aclamó tras la victoria pero que durante el encuentro alentó principalmente a Sinner. Mónaco está muy cerca de Italia.

El campeón olímpico tuvo que batallar mucho para vencer. En el último set llegó a tener su servicio en 5-4, pero Sinner igualó y el parcial terminó en el tie break, en el que finalmente el alemán cumplió el objetivo.

En tanto, Schwartzman, de 29 años, y Tsitsipas quedaron ahora 2-2 en su historial. El argentino triunfó en el ATP de Amberes, Bélgica, en 2017, y este año por la Copa ATP en Australia, y antes de la frenética noche de este viernes, había perdido en la versión 2018 por el trofeo Conde de Godó, en Barcelona.

La gente, con Peque

El porteño se había instalado entre los ocho mejores en Mónaco luego de dejar en el camino al ruso Karen Khachanov (24º), al húngaro Marton Fucsovics (57º) y al italiano Lorenzo Musetti (83º). Con remontadas impresionantes, en un par de casos.

La definición

El Masters 1000 de Montecarlo tuvo tres campeones argentinos en su historia: Guillermo Vilas, vencedor en 1976 y 1982; Alberto Mancini, en 1989, y Guillermo Coria, en 2004.

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