Mundial Rusia 2018. Rostov Del Don, la tierra de los cosacos: una sede con historia, cultura y deporte

MOSCU.- En el sudoeste ruso emerge una ciudad que no sólo se destaca por ser la tierra de los cosacos, sino que también impacta por la cultura, el deporte y sus bellezas naturales. Con el FC Rostov como el equipo que lleva la bandera del fútbol -ganó la Copa de Rusia 2013/2014, fue subcampeón de la Premier League en 2015/2016 y llegó a jugar Champions League y Europa League-, el Mundial Rusia 2018 no le será extraño a una sede marcada por la actividad deportiva: es la región con el mayor número de campeones olímpicos per capita. El Don es el río al que le debe su nombre, y es uno de los límites naturales entre Europa y Asia.

Rostov del Don ofrece una vida similar a la de otras grandes ciudades, como los pesos pesados Moscú, San Petersburgo o Sochi. En sus calles se podrán encontrar un buen número de monumentos, comercios, cafés, parques e iglesias. La Troika -el trineo tirado por tres caballos- es uno de los símbolos de Rusia y pertenece a la tradición de los cosacos.

Establecida en 1749 como una casa de aduanas, que pronto se convirtió en una gran fortaleza, la ciudad creció a orillas del Don y logró una gran evolución gracias a su ubicación. Durante la Segunda Guerra Mundial gran parte de la ciudad quedó reducida a escombros por las fuerzas alemanas que la ocuparon en dos ocasiones. Hoy en día, el monumento más característico de la ciudad es la enorme Catedral de la Virgen de la Natividad.

Rostov Arena. Construido especialmente para el certamen, el estadio de la ciudad de Rostov del Don también tendrá capacidad para 45.000 personas. En el futuro, el Rostov jugará allí sus partidos como local.

Esta sede albergará cinco encuentros: Brasil vs. Suiza (17/6), Uruguay vs. Arabia Saudita (20/6), Corea del Sur vs. México (23/6), Islandia vs. Croacia (26/6) y un cruce de octavos de final.