Rosario Central - Central Córdoba, por la Copa de la Liga: un golazo de Milton Giménez en el quinto minuto de descuento frustró al Canalla y a Ruben

Rosario Central estaba consiguiendo una victoria que lo posicionaba bien en la Zona 1, pero en el minuto 50 del segundo tiempo Milton Giménez, con un golazo tremendo de tiro libre al ángulo superior derecho de Broun puso el 2-2 definitivo para Central Córdoba. Eso despertó el elogio del DT Gustavo Coleoni: “Giménez no tiene techo”, dijo mientras ingresaba feliz en el vestuario visitante del Gigante de Arroyito.

En el encuentro disputado por la 7ma fecha, los demás goles los marcaron Marco Ruben, de penal, y Damián Martínez (para los locales) y Leonardo Sequeira para el conjunto de Santiago del Estero. Con este resultado, festejó Central Córdoba, por haber encontrado el empate de manera emotiva pero, al mismo tiempo, porque así llegó a los 12 puntos y está como escolta del líder Colón, que manda con 19 unidades en la Zona 1.

Lo mejor del partido

Se trepa Central Córdoba y se ilusiona. Se quiere codear con el Grupo de los 4 para a sentirse protagonista por primera vez en la categoría Premier del fútbol argentino. Claro, tiene muchos altibajos y eso le resta serenidad y solidez, pero sabe a que juega.

En la noche del sábado, en un mal partido en general, le empató en la última jugada a Rosario Central para quedar segundo junto a Banfield. Central que tenía todo para mezclarse en el lote de arriba, vio como Milton Gimenez, el mejor de la noche, la puso en el ángulo. Premios y castigos por ambos lados, en definitiva.

¿Juega bien el equipo de Coleoni? Tiene un plan, tiene intensidad, y un puñado de jugadores capaces de resolver situaciones en ataque.

¿Juega bien el equipo del Kily? Desde los números parecía existir alguna razón para sostener eso. Y mucho más si la victoria, por la que hizo algún mérito ante Central Córdoba, se quedaba en Arroyito. Pero... Verdad de Perogrullo, los partidos terminan con el silbato final.

Claro que mas allá de anoche se enfrentaron dos equipos con un alto grado de similitud. Dos conjuntos en construcción de ideas, de juego, de proyectos a futuro. El Kily González, que busca hacer pie, y Coleoni, que retoma la conducción. No hay mucha diferencia mas allá de la lógica que marca la historia de uno y otro.

El local cuenta con dos hombres que en pequeños detalles permiten sacar la distancia. La sapiencia del capitán Emiliano Vecchio par a entender algunos momentos del encuentro, y la tranquilidad del histórico goleador, Marco Ruben. Esos eran los argumentos, y lo sigue siendo, cuando se habla de lo que pasó.

El partido fue intenso, con la búsqueda de ambos en discutir la posesión de la pelota y no dejarse superar. Un semblante que recorrió los noventa minutos.

El inicio del local fue sorprendente, con pelotazos buscando a los delanteros pero con una presión permanente en la zona de los volantes. Un esquema que no había usado Rosario Central en partidos anteriores, porque siempre descansó en la inteligencia de Emiliano Vecchio para crecer desde abajo.

Central Córdoba trocó la postura defensiva inicial por una presión en la mitad de la cancha que le dio resultados. Por eso, los envíos largos del local pasaron de ser un recurso elegido a salidas precipitadas y sin sentido. Nada mas cómodo para el visitante. Perdido Vecchio entre tanto juego lejos del césped del Gigante, Central no dispuso de la pelota con claridad. Y aunque Vecchio bajó el nivel en los últimos partidos, ya que arrastra una lesión en el tobillo izquierdo, es el faro de un equipo que a veces entra en la neblina.

Central encontró a los 25 minutos una pelota de gol a partir de una lectura inteligente de Marinelli. La diagonal del juvenil fue precisa, pero el arquero Mehring también interpretó y tapó el mano a mano.

La intensidad se transformó es desprolijidad y todo fue un desorden. Y el gol llegó por una torpeza enorme de sobre de la defensa visitante, que se llevaron por delante a Martínez. Marco Ruben tocó con su calidad habitual para sacar la diferencia, de penal, a los 45.

No se habían acomodado en el complemento cuando llegó el empate. Una contra a tres toques con una conducción de Milton Giménez de “Premier League”, ya que gambeteó con el control ante un desorientado Ferreyra para una asistencia exacta para el ingreso de Sequeira por el segundo palo.

Desde el gol, la energía del partido la manejó el visitante. Anticipos y ganas, enjundia y presencia.

Pero la ventaja la puso el canalla. En un ataque individual, en otra trepada de Gastón Avila, el defensor con gran técnica avanzó y sacó un remate seco que obligó a dar un rebote a Mehring, para que otro defensor, Damián Martínez, amplíe. Es el segundo gol del ex Unión en el campeonato, ya que le marcó a Arsenal en una jugada similar.

El partido siguió entreverado y mal jugado. Pero con la incertidumbre del resultado. Los santiagueños, con el ímpetu, y los canallas, con ganas de cerrar el marcador. Desde esa emoción, se hizo un partido llevadero.

La noche parecía premiar al los del Kily. Pero Patricio Cucchi y Martín Rabuñal perdieron inocentemente una pelota en la salida y el tiro libre de la puerta de área le dio una vida mas a los ferrovarios. Milton Gimenez le pegó como para poner la pelota en un cuadrito. Fue empate y, en definitiva, le quedó bien al cruce.