Los Pumas se enfriaron y Australia les robó el partido en Mendoza por el Rugby Championship

MENDOZA.– Después de disfrutar una ventaja de nueve puntos, en los últimos 20 minutos los Pumas comenzaron a cometer un penal tras otro y Australia dio vuelta el partido para imponerse 41-26. A medida que el frío del atardecer empezaba a invadir el estadio, también pareció perder temperatura el seleccionado argentino, que durante los primeros 60 minutos había disfrutado de buenos momentos tanto en ataque como en defensa y ganaba 26-17.

Un penal tras otro pareció ser el único método que tuvieron los Pumas para frenar la dinámica de los australianos en ese cuarto final del partido en el estadio mundialista de esta ciudad, cuyos 33.000 espectadores no lograron trasladar calidez al terreno de juego pero despidieron al equipo con una ovación reconfortante pese a la derrota.

Así, los Pumas dejaron pasar una buena chance de arrancar con el pie derecho el Rugby Championship 2022 ante un rival que llegaba golpeado. Si bien por momentos lograron imponer su juego, tanto en ataque como en defensa, también repitieron algunos errores de los primeros tres partidos del flamante ciclo de Michael Cheika como entrenador. Especialmente, la defensa cerca del in-goal y el exceso de penales.

En los últimos 20 minutos, Australia manejó el partido a voluntad a partir de que imprimió un ritmo veloz y dinámico al que los argentinos no le encontraron respuesta. El último cuarto del partido finalizó 24-0 para los Wallabies, que con el triunfo con punto bonus quedaron como punteros únicos del certamen tras la primera fecha.

El primer try de los Pumas (Matera)

Tanto al inicio del partido y en un buen lapso del segundo tiempo, los Pumas lograron imponerse en base a presión y buenos tackles, que les permitieron recuperar pelotas y ponerse en ataque. Con la posesión, supieron ser pacientes y encontraron agujeros en la defensa. Una tarde inspirada de Emiliano Boffelli (6/7 a los palos, 16 puntos) le permitió mantener ventaja en el marcador pese a las oportunidades desperdiciadas; un par de situaciones desperdiciadas por knock-on podrían haber cambiado la historia, también. Pero Australia se mantuvo en partido y golpeó en el cierre, que había sido una de las virtudes de los argentinos ante Escocia.

Cuando Australia tomaba velocidad sólo lo podían frenar con penales

En la primera acción los Pumas dejaron en claro cómo iban a jugar el partido. Presión sobre la salida profunda, bloqueo del despeje por parte de Lavanini y luego tackle furibundo de Kremer para provocar el knock-on. No terminó en try porque Matera perdió la pelota a centímetros del in-goal, pero tendría revancha unos minutos más tarde luego de una buena jugada de line-out y una linda habilitación interna de Carreras. Sólo seis minutos tardaron los Pumas en quebrar el in-goal.

La presión se mantuvo y le permitió a Boffelli estirar la ventaja con penales, a resguardo aun del descuento australiano. Una mala salida del campo propio (una de las deudas pendientes de este corto ciclo) derivó en penal en contra y, cerca del in-goal, Australia no tuvo mayores dificultades en cruzar la línea jugando por afuera; a los 17 apoyó Jordan Petaia. Ese es otro déficit de estos cuatro primeros partidos con Cheika en la conducción: el tackle en extrema defensa.

Sin embargo, lo pudieron corregir en una acción posterior en que Australia acechaba y lograron salir indemnes. Un penal ganado en el scrum derivó en otra infracción de los australianos frente a los palos; los Pumas eligieron ir al line-out, pero fallaron en el maul. Boffelli tuvo revancha con el tiempo cumplido y volvió a acertar para que los argentinos se fueran al descanso 19-10 arriba.

Australia empezó mejor la segunda mitad y a partir de un buen contraataque se puso en extremo ataque. No le resultó tan fácil como la primera vez, pero logró llegar al try y se puso a dos (19-17). En la acción salió lesionado en el tobillo Quade Cooper, reemplazado por el veterano Reece Hodge.

Los Pumas reaccionaron de la forma adecuada. Volvieron a meter presión con el tackle y fueron pacientes e incisivos para buscar espacios en el ataque. Carreras tuvo el try tras un buen quiebre de Kremer, pero se le cayó la pelota. Enseguida, Mallía emprendió un gran contraataque desde el campo propio: leyó bien que tenía un pilar enfrente y lo eludió, luego habilitó con un gran salteo a Matera, quien corrió varios metros y esperó el momento adecuado para cederle el try a Juan Martín González; Boffelli sumó dos más desde la línea de touch.

El segundo try de los Pumas (González)

Una seguidilla de penales volvió a poner a los Pumas con la espalda contra el in-goal. Primero un try-penal y luego un acierto de Hodge de 40 metros le dieron a Australia la primera ventaja del partido (27-26), que aumentó rápidamente con el try de Fainga’a, otra vez tras una sucesión de infracciones (34-26). Hasta Boffelli se enfrió y falló un penal de mitad de cancha que era para ponerse a tiro de try convertido, y en la última acción, que se extendió más de cinco minutos después de la chicharra, Len Ikitau puso cifras definitivas.

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