Polémica en el Abierto de Australia. Residentes de Melbourne le temen a los tenistas por el coronavirus

A las autoridades de Tennis Australia, la entidad que administra el deporte de las raquetas de ese país, les llevó meses lograr la autorización del gobierno para la realización del Abierto de Australia, el primer Grand Slam del calendario, a partir del 8 de febrero. Sin embargo, surgió un nuevo obstáculo: los propietarios de 36 departamentos privados de The Westin Melbourne, el hotel donde pondrán en cuarentena a cientos de jugadores e integrantes de sus equipos a partir del 14 o 15 de este mes, amenazan con realizar acciones legales.

Los propietarios de los departamentos, algunos de los cuales viven permanentemente allí, afirman, según un informe del diario The Age, que la afluencia de tenistas de todo el mundo "representa un riesgo de salud inaceptable" para ellos y la comunidad en general. La gerencia del hotel fue acusada de no consultar adecuadamente a los propietarios, quienes ahora están considerando recurrir a la Corte Suprema.

Según el plan de Tennis Australia, los jugadores internacionales deberán permanecer en cuarentena durante 14 días en el hotel Westin, pero se les permitirá salir del hotel durante un bloque diario de cinco horas para practicar y recibir tratamiento. Durante la cuarentena, serán examinados por el riesgo del Covid-19 al menos cinco veces y serán supervisados mientras practican en el Melbourne Park.

Los propietarios de las residencias que hay en el hotel Westin fueron notificados del protocolo de los organizadores del Abierto de Australia el 23 de diciembre pasado a través de un correo electrónico, pero están preocupados por la falta de información sobre el aire acondicionado y la posibilidad de transmitir el virus entre pisos a través de conductos y ventilaciones. El gerente general del hotel, Stephen Ferrigno, comunicó que la "oportunidad de aceptar a los tenistas internacionales se presentó como un salvavidas para el negocio hotelero y, al mismo tiempo, una oportunidad para apoyar la comunidad en la que vivimos".

Varias personalidades corporativas influyentes de Australia poseen departamentos privados en el edificio en cuestión. "Es increíblemente arrogante tendernos una emboscada de esta manera como si fuera un trato hecho. Hay importantes problemas legales y de salud pública que ni siquiera han sido examinados", sentenció Mark Nicholson, gerente de inversiones.

Australia registró un total de 28.500 casos de coronavirus y 909 fallecidos, 820 de ellos del estado de Victoria, cuya capital es Melbourne.