La emoción de Carlos Berlocq en el US Open: "Valoro más las palabras de mis hijos que una victoria"

NUEVA YORK - A los 35 años, Carlos Berlocq mantiene su estirpe de batallador de los courts. Desde el puesto 172° del ranking, el hombre de Chascomús ganó tres partidos y se dio el gusto de ingresar en el cuadro principal del US Open . Le tocó despedirse en primera rueda, no sin antes luchar hasta el último punto contra el canadiense Milos Raonic , vencedor por 7-6 (7-4), 6-4, 1-6 y 6-3.

Después del partido, Berlocq habló sobre este momento de su carrera: "Yo soy un agradecido del tenis, que me dio y me sigue dando muchísimo, es un momento muy especial, porque uno trabaja mucho para tener semanas como esta, en las que pude volver a sentir lo que significa estar en los torneos grandes".

Pero no pudo evitar que la emoción lo desbordara, y al borde de las lágrimas, continuó: "Poder ganar esos tres partidos [de la qualy] son para mi familia, para la gente que sigue confiando en que yo puedo dar batalla. Es imposible describir lo que uno siente cuando mis hijos (Stefanía y Agustín) me alientan, o saber que mi esposa se queda con ellos. Hoy mi hija no fue al colegio para poder verme en la tele... Uno intenta ganar para darles a ellos la victoria, es como una caricia que les devuelvo por todo lo que ellos desean que me vaya bien"

Nadie tiene fecha de vencimiento, como nunca dije voy a jugar o dejar de jugar este año. Voy momento tras momento. Mi desafío es tratar de volver a estar dentro de los 100 mejores antes de mi retiro

"Ellos me ven luchar cada punto, y después me dicen que están orgullosos de mí. Eso para mí es lo más importante. Yo no soy un enloquecido de los triunfos y valoro más las palabras de mis hijos que una victoria, con eso me lleno totalmente", remarcó Berlocq, que por estas semanas evalúa la posibilidad de mudarse con sus afectos a Alicante, en España.

Sobre su futuro, Charly comentó: "Nadie tiene fecha de vencimiento, como nunca dije voy a jugar o dejar de jugar este año. Voy momento tras momento. Mi desafío es tratar de volver a estar dentro de los 100 mejores antes de mi retiro, estar con ese ranking, y poder jugar varios de estos torneos. Sé que es difícil y que hay que ganar muchísimos partidos. Lo más inteligente es jugar como lo hice en este torneo, disfrutando cada punto, más allá de un resultado o de un ranking. Sé que si me enfoco más en eso y tengo salud, puedo mejorar y cumplir ese objetivo. Y si no lo consigo, no importa porque el tenis ya me dio muchísimo".