Un día indeseable en el que surgió la deslealtad

BRAGADO.- Las mañas y las trampas por las que se identifica a los argentinos en el exterior se hicieron presentes, inesperadamente en la prueba contrarreloj de 10 kilómetros, que se realizó en esta ciudad, en la 64ª Doble Bragado. La de ayer fue una jornada doble: por la mañana, Carlos Quiroga se adjudicó la quinta etapa, con un tiempo de 15m48s, y por la tarde, Luis Lorenz venció en la sexta (un circuito urbano de 99,2 km), con una marca de 2h15m43s.

El día comenzó complicado: en plena disputa de la contrarreloj, un par de ciclistas -que no pudieron ser identificados- tiraron tachuelas en el recorrido, a sólo dos kilómetros de la llegada. Fernando Antogna, Claudio Zanabria, Walter Pérez y Gerardo Fernández fueron los perjudicados, ya que debieron finalizar sus pruebas con las ruedas pinchadas.

Se empañó la fiesta. Entre la sorpresa y la indignación, los comentarios de lo acontecido se pasearon por un pueblo que se desvive por el ciclismo.

El dolor es grande; la tristeza y la desazón, aún mayores. La dureza de una competencia no da derecho a sus participantes, amparados en el anonimato, para sacar ventajas con artilugios poco honrosos. Fue una traición: a la gente, a la más tradicional de las pruebas ciclísticas del país, al deporte. Pero sobre todo, fue una traición a ellos mismos, que no tuvieron la suficiente dignidad para vencer en la ruta.

La tarde se presentó más calma. Por los altavoces, la voz grave del locutor, René Giovanetti, anunciaba uno a uno el nombre de cada participante. La emoción invadió a más de 10.000 personas que se juntaron a lo largo del circuito de 6,2 km.

Partió el pelotón en busca de completar las 16 vueltas que parecían interminables. Los espectadores siguieron palmo a palmo las alternativas de una carrera tan intensa como variable, y premiaron con aplausos el paso de los corredores.

La victoria fue de Lorenz, pero la mayor satisfacción quedó en manos de Walter Pérez, que al finalizar segundo en la etapa, se posicionó primero en la clasificación general. Los 25 segundos de diferencia sobre Carlos Quiroga presagian la casi segura victoria del hombre del equipo Toledo.

Hoy, a las 8, cuando se largue la última etapa (150km) Pérez buscará la máxima satisfacción y una entrada triunfal en Luján, para cumplir con uno de los anhelos de todo ciclista: ganar la Doble Bragado.