La escalofriante imagen satelital sobre el daño que causó el granizo en el campo

Casi 100.000 hectáreas fueron afectadas por la caída de granizo que se registró la semana pasada en el sur de Santa Fe, fenómeno que incluso se expandió también hacia el norte bonaerense.

El dato surge de un relevamiento con imágenes satelitales que realizó Joaquín Lascombes, un ingeniero agrónomo que realiza monitoreos en base a imágenes satelitales.

“El impacto del granizo en los campos de Villa Cañás y Saguier/San Francisco visto por Sentinel 2 del 17-12-21″, escribió Lascombes en su cuenta de Twitter. Según precisó, ascienden a 96.000 las hectáreas de cultivos afectadas por el granizo en la región.

La semana pasada, un fuerte temporal afectó a una región que fue desde desde Teodelina, Villa Cañás, en Santa Fe, e incluso hasta Colón, en el norte bonaerense. Hubo una manga de granizo que algunos expertos calcularon en unos 15 a 20 kilómetros.

De acuerdo a la estimación de Lascombes, resultaron afectadas 18.500 hectáreas en San Jorge-San Vicente; 29.000 en San Francisco-Saguier y 48.500 en Villa Cañas-Ferré.

Tras el dato que brindó en Twitter el ingeniero agrónomo, varios usuarios destacaron el fenómeno que afectó a los cultivos. “Es increíble. Salí a recorrer después de la tormenta y varios kilómetros después seguía el daño. No terminaba más”, señaló Martín Demarchi. “El núcleo donde pasó viento, piedra y agua parece que explotó una bomba, de terror”, agregó Javier Gustavo Re.

En un informe, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) señaló que en una franja del sur santafesino la tormenta de granizo del martes pasado “dejó daños del 50 al 100% en una gran cantidad de lotes de maíz y soja.”

“Una tormenta de viento y granizo afectó severamente la franja que se extiende desde María Teresa, pasando por Villa Cañás, San Marcelo y Teodelina hasta Colón. Al momento no hay una estimación de la superficie afectada, pero los cultivos con mayor daño son los maíces tempranos y la soja de primera. Los porcentajes de pérdida oscilan entre un 50 a 100%, según el lote”, dijo la entidad.

“En gran parte de los lotes de maíz temprano han quedado solo los tocones visibles. En otros lotes, donde ha quedado algo de cultivo en pie, se evalúa si continuar con el cultivo, apostando a rindes de 40 a 50 qq/ha o resembrar. Sin embargo, en estos lotes con menor daño, los asesores también consideran el riesgo potencial de vuelco hacia final del ciclo”, agregó.

En rigor, destacó que los asesores señalan: “Donde quedó muy poca área foliar remanente, las plantas sufrirán una fuerte removilización que podría debilitar los tallos, por lo que probablemente deberíamos cosechar temprano con alta humedad para evitar vuelco, debiendo afrontar gastos extras de secada. Esto sumado a los escasez de polen que tenemos, ya que los maíces estaban cursando la floración masculina”.

Respecto de la soja de primera, detalló que “el panorama es similar”. Precisó que en algunos lotes los productores “comenzarán a resembrar a contrarreloj para evitar que se pase la fecha límite. En el caso de la soja de segunda no sería necesario volver a sembrar ya que el cultivo recién está emergiendo o en los primeros estadios de su crecimiento, por lo que los daños sobre estos cuadros fueron menores”.