Una recesión en los países desarrollados provocará una caída del consumo
RESISTENCIA.- El mayor problema del algodón es el precio, y por ahora no se pronostica que sean mejores. Este es el panorama sobre la producción y mercado mundial del textil que presentó el economista del Comité Consultivo Internacional del Algodón, el colombiano Carlos Valderrama Becerra durante una disertación en la Universidad Tecnológica Nacional.
Valderrama Becerra dijo que el precio del algodón depende hoy de que las economías del mundo crezcan saludablemente y si los precios del petróleo no bajan, seguramente se irá camino de una recesión de los países industrializados y el consumo no subirá y tampoco los precios.
En la Argentina -dijo el especialista-, el elemento precio es sumamente delicado este año. Con una rebaja de la producción mundial, que todavía está por encima del consumo, los precios podrían subir, pero están sujetos a la colocación de productos chinos en la Unión Europea y Estados Unidos. A Brasil, el economista lo vio muy pujante. El año pasado tuvo un incremento de producción de 4.000.000 de toneladas pasando a 26.000.000 de toneladas, pasando a ser el quinto productor mundial, debido a una combinación de prácticas de alta tecnología, muy reducidos costos y planes estratégicos del gobierno.
Respecto de Paraguay, Valderrama Becerra dijo que el año pasado tuvo una muy mala campaña por la sequía lo que bajó los rendimientos, que fueron los peores desde 1981.
Aporte
Frente a esta difícil situación, la Cámara de Diputados de la Nación aprobó en su última sesión el Plan de Desarrollo Sustentable y Fomento de la Producción Algodonera, que incluye un aporte de 50.000.000 pesos de fomento y un seguro para afianzar la producción del textil.
Según se informó, este fondo servirá para que la producción logre sustentabilidad, es decir, para hacer frente a la baja de los precios del mercado y de esta manera, que el productor no pierda.
El instrumento autoriza al Poder Ejecutivo Nacional y a las provincias que se adhieran a la ley a contratar seguros y servicios conexos o asistir financieramente al productor en la contratación de los mismos, contra las caídas extraordinarias de la producción debido a las adversidades climáticas y biológicas que afecten un área greográfica algodonera identificada por la autoridad de aplicación.
Cabe recordar que la Argentina logró en la última campaña algodonera una producción de 421.470 toneladas de algodón en bruto que significan alrededor de 145.000 toneladas de fibra que alcanzaron para las necesidades que tuvo la industria textil nacional.
La incógnita para esta campaña es la superficie a implantar debido a los bajos precios del mercado internacional, y se estima que podría reducirse en un 40 por ciento. Sin embargo, con la ley aprobada podría revertirse esta situación. Falta definir la instrumentación del apoyo para que los productores sepan qué hacer antes de la siembra que se inicia el mes próximo.