LA NACION CONTENT LAB
PARA RIZOBACTER
Cómo lograr una mezcla
homogénea de herbicidas
Integrum de Rizobacter es una tecnología que optimiza al máximo
las pulverizaciones de malezas.
La creciente problemática de las malezas resistentes provoca en productores y asesores más de un dolor de cabeza, ya que no controlarlas en tiempo y forma puede generar una gran merma en el rendimiento de la cosecha. La resistencia al glifosato obliga a combinar determinadas prácticas agrícolas con los mejores insumos, teniendo en cuenta a la vez un sinnúmero de variables. Pero un detalle no menor de una estrategia exitosa es la elección de un aceite de calidad que asegure el éxito de las pulverizaciones.
Cada pulverización implica un gran costo para el productor, por lo que lograr una mezcla óptima de fitosanitarios ocupa un rol crucial en la sustentabilidad de todo el proceso. El mercado local de los aceites como adyuvantes se vio revolucionado hace aproximadamente diez años, cuando Rizobacter lanzó en el país su producto Extremo, un aceite de calidad que integró a su formulación la silicona y que hoy cubre unas 7 millones de hectáreas en toda la Argentina. Con él, ya no fue necesario elegir entre un tensioactivo o un aceite, pues reunía ambas propiedades. Pero los aceites siguieron evolucionando y la compañía hoy también comercializa otro producto disruptivo: Rizospray Integrum.
“Hoy el productor invierte mucho dinero en una aplicación. Entre fitosanitarios y costo de la aplicación, estamos hablando de unos 50 o 60 dólares por hectárea y más de 5000 dólares por tanque. Entonces si llega a haber algún problema con la mezcla y hay que descartarla, la pérdida es enorme”.
— Juan Pablo Timpone, jefe global de la línea de Adyuvantes de Rizobacter
Si los tradicionales tensioactivos son fundamentales para que las mezclas se esparzan, los aceites de calidad también pueden cumplir con esa función pero, además, evitan que, por ejemplo, la gota se evapore cuando hace calor. Esta fórmula sirve muy bien para la aplicación de funguicidas o insecticidas. Pero la problemática de las malezas exigía algo más, que vino a aportar Integrum.
Con Integrum, Rizobacter ofrece el único adyuvante del mercado diseñado químicamente para potenciar graminicidas, con atributos antievaporantes, penetrantes y translocantes. Se trata de una microemulsión termodinámicamente estable que incrementa la estabilidad de las mezclas de tanque de alta complejidad de la agricultura actual. Rizospray Integrum no se separa en fases, por lo que evita la estratificación de insumos en el caldo de pulverización.
“Integrum es nuestro producto más moderno. No es una emulsión sino una microemulsión, con lo cual ya no hay separación de fase. Y si bien cuando lo lanzamos nos enfocamos en cómo potenciaba los graminicidas, luego nos dimos cuenta de que la gente lo valoraba también por su capacidad de homogeneizar caldos difíciles”.
— Juan Pablo Timpone, jefe global de la línea
de Adyuvantes de Rizobacter
El compromiso de Rizobacter con la producción agrícola no se agota en su innovador portfolio. La compañía, por ejemplo, ayuda a los productores a conocer la calidad del agua con la que realizan sus pulverizaciones haciendo análisis gratuitos. Cada año evalúan más de mil muestras, una tarea más que valorable porque la alta presencia de calcio y magnesio pueden hacer perder una gran cantidad de herbicida.
Otro de los focos de la empresa para ofrecer mejores productos y recomendaciones para su aplicación es la captación de datos sobre ensayos. Además de los campos propios y la plataforma interna de investigación y desarrollo, Rizobacter contrata a diversos colaboradores externos en todo el país para profundizar las experimentaciones y tiene alianzas con importantes socios internacionales para el diseño de sus productos. Este año, además, la compañía estará inaugurando un laboratorio propio en el país.
“Va a ser un laboratorio de evaluación de adyuvantes con máquinas e instrumental únicos en Latinoamérica. Nos va a permitir seguir rompiendo los límites de la innovación y llevando información de calidad superior a los productores.”
— Juan Pablo Timpone, jefe global de la línea
de Adyuvantes de Rizobacter
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