Se utiliza muy poca genética evaluada

Los ganaderos incorporan cada año unos 150.000 toros a sus rodeos, solo el 25% de ellos habrán sido evaluados y registrados. Aún agregando la inseminación artificial, solo una de cada cuatro hembras de carne expuestas a servicio se preñarán con toros mejoradores. Podemos discutir las causas, que son múltiples, pero pienso que la principal es la falta de políticas estables para un sector que desde hace más de 50 años oscila entre mercados domésticos y de exportación, con baja rentabilidad y sin contar con un norte claro hacia que tipo de animal seleccionar.

Hoy frente a una ventana de oportunidad generada por la sostenida demanda internacional, con una importante oferta de carnes sustitutas para atender al mercado interno, pareciera que vamos hacia un modelo más racional del negocio, con mayor estandarización de reses y una fuerte interacción con los frigoríficos.

Lo logrado demuestra de que modo puede interactuar el sector público y privado para lograr resultados de excelencia. Los mejores recursos humanos de la Universidad de Buenos Aires, La Plata, el INTA -solo para citar algunos ejemplos- han trabajado codo a codo con las asociaciones para diseñar y operar programas de mejoramiento.

Es central realizar nuestras propias investigaciones, acorde a los sistemas de producción local . El estudio del ADN y la Genómica nos permitirán seleccionar individuos más eficientes, resistentes a enfermedades o a condiciones climáticas difíciles, mitigar la emisión de gases de invernadero y trabajar en aspectos de importancia en materia de calidad de carnes. El ganadero debe ser el dueño de la información de su ADN, pues es quien lleva adelante la selección, y realiza la toma de datos para la evaluación.

El Foro Argentino de Genética Bovina está integrado por asociaciones de criadores, centros de Inseminación Artificial, transferencistas de embriones, genetistas y entidades responsables de los registros de pedigree como la Sociedad Rural Argentina, todos en pos de una ganadería más competitiva, que multiplique su valor y sea un pilar del desarrollo económico y humano del interior del país. Nuestra genética es demandada hoy por muchos países ganaderos, es necesaria una política activa para abrir protocolos con esos mercados, se trata -nada más y nada menos- de exportar biotecnología con alto valor agregado.

La mayor ambición del Foro es que año a año sea mayor el uso de genética evaluada en los rodeos y es nuestra tarea explicarlo para que de la misma manera que a ningún agricultor se le ocurriría sembrar una semilla sin respaldo, llegue el momento que el ganadero perciba el impacto económico de usar la información del ADN para mejorar su producción.

El autor es presidente del Foro de Genética Bovina