La oferta de semillas para la próxima campaña de granos gruesos está asegurada, según informó la industria esta semana en una conferencia de prensa vía Zoom.
En la presentación, la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA) dijo "que la actividad respondió rápidamente ante la aparición de la pandemia de COVID-19 para garantizar la producción de alimentos".
La producción de semilla fiscalizada se desarrolló sobre casi 428.732 hectáreas, previstas al inicio de la campaña, añadió ASA.
"La actividad se desarrolló prácticamente con normalidad durante esta etapa. El sector logró garantizar el abastecimiento de semillas para la producción, teniendo como prioridad la seguridad de sus trabajadores", dijo la presidenta de ASA, Lorena Basso. Además, explicó que "la producción 2019-2020 concluyó con los resultados esperados" y añadió: "contamos con una excelente oferta de semillas para la próxima campaña agrícola argentina".
En tanto, el director ejecutivo de ASA, Alfredo Paseyro, dijo que se "mantuvo el empleo para todo el proceso de producción de semilla de maíz en niveles similares a los de la campaña anterior".
Los directivos de ASA explicaron que se aplicaron protocolos de acuerdo con las recomendaciones de los organismos de salud y control, en los que se puso el foco en la seguridad de cada trabajador. "Estos protocolos incluyen buenas prácticas para evitar el contagio del virus y, también, para la detección temprana de casos sospechosos; contienen variadas recomendaciones que van desde no compartir cabinas de máquinas, hasta el establecimiento de metodologías de trabajo con antelación", indicaron.
Por otra parte se reorganizó el trabajo para hacerlo en forma remota, especialmente el de aquellas tareas que lo permitían, como las administrativas. Estas medidas, "permitieron prevenir contagios en empresas, campamentos y plantas", dijeron.
"Los estrictos protocolos adoptados y la continuidad de las tareas hicieron que se pudiera llevar tranquilidad y previsibilidad a más de 10.000 familias de los trabajadores temporarios que dependen del sector, garantizando en todo momento su salario", dijo Paseyro.
En el informe, ASA indicó que de las poco más de 428.700 ha sembradas en la campaña 2019/2020, el 82,6% correspondió a semilla de soja (con 354.012 ha), el 12% a maíz (con 54.493 ha), el 3% a girasol (con 12.812 ha.) y el sorgo, con 1,7% (12.812 ha.).
A su vez, el personal ocupado en las tareas alcanzó a los 10.425 empleados y operarios, distribuidos en diez provincias. La mayor parte de los puestos de trabajo correspondió a la provincia de Buenos Aires, con el 70% de los trabajadores en 98 campamentos y centros habitacionales. Siguió Santa Fe, con un 11% (en 18 campamentos) y en menor número Córdoba (11 campamentos), Entre Ríos (4 campamentos) y San Luis, Catamarca, Chaco, Santiago del Estero, Mendoza y Río Negro.
"Se fortaleció la red existente entre empresas y productores, lo que permitió generar alertas ante las dificultades logísticas", dijo Paseyro.