Volvieron a mejorar los precios de la soja en el mercado local

La leve suba externa y la devaluación del peso frente al dólar posibilitaron hoy una nueva mejora del valor de la soja en el mercado doméstico de granos, donde las fábricas ofrecieron 7500 pesos por tonelada con entrega sobre las terminales del Gran Rosario, $200 más que ayer. Así, en las últimas dos jornadas de negocios la oleaginosa sumó 400 pesos por tonelada.

El valor ofertado por los compradores quedó por encima de los 7473 pesos por tonelada fijados por el Ministerio de Agroindustria de la Nación como FAS teórico para el poroto de soja exportable y de los 7207 pesos calculados por la Bolsa de Comercio de Rosario como capacidad de pago de la industria aceitera. Pese a esto, fuentes del sector contaron que los negocios resultaron muy escasos.

Las propuestas por el grano de la próxima cosecha también mejoraron, al crecer de 275 a 277 dólares por tonelada. En cambio, en el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) la rueda fue negativa para los precios de la soja, dado que las posiciones noviembre y mayo resignaron US$0,50 y 0,70, mientras que sus ajustes fueron de 292,50 y de 282,90 dólares por tonelada.

En la Bolsa de Chicago los contratos agosto y septiembre de la soja subieron US$1,65 y terminaron la jornada con ajustes de 328,40 y de 330,60 dólares por tonelada. Entre los factores que alentaron las ganancias se destacaron los pronósticos de tiempo caluroso y seco para los próximos días en las zonas productoras de granos gruesos estadounidenses.

Además, la noticia de que China importó en julio un 7,93% menos de soja que en junio (8,01 contra 8,70 millones de toneladas) fue interpretada por los operadores como una señal de agotamiento de la oferta sudamericana y como un síntoma de necesidad de mercadería estadounidense. En julio de 2017 las compras de China habían alcanzado un récord cercano a los 10 millones de toneladas.

Maíz y trigo

En el mercado doméstico del maíz el mayor movimiento pasó por el grano de la próxima cosecha. En efecto, pese a la apreciación del dólar en casi un 1%, por las posiciones de entrega marzo/abril y junio/julio los exportadores volvieron a ofrecer 170 y 165 dólares por tonelada, respectivamente. Una fuente del sector comercial indicó a LA NACION que se negociaron unas 150.000 toneladas del cereal de la campaña 2018/2019.

Acerca del maíz disponible, los exportadores mantuvieron sin variantes sus propuestas: $4600 por tonelada para Bahía Blanca y $4500 para el Gran Rosario y para Necochea. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) informó que los consumos pagaron entre 3600 y 4650 pesos por tonelada de cereal seco, según calidad, procedencia y forma de pago.

En el Matba el saldo fue positivo para el maíz, dado que los contratos septiembre y abril sumaron US$2 y 0,70, en tanto que sus ajustes resultaron de 170 y de 171 dólares por tonelada.

Las posiciones septiembre y diciembre del maíz en Chicago subieron US$0,19 y 0,20, en tanto que sus valores de ajuste fueron 146,15 y 151,57 dólares por tonelada.

Respecto del trigo, el mercado local volvió a mostrar firmeza en materia de precios, aunque el volumen operado resultó bastante inferior al de la rueda previa. Las propuestas de los exportadores por el grano 2018/2019 fueron de 220 dólares para las entregas entre noviembre y diciembre; de 225 dólares para enero, y de 230 dólares para el bimestre febrero/marzo. Tras la rueda se calcularon ventas por unas 15.000 toneladas, contra las 50.000 del martes.

Por trigo disponible los compradores ofrecieron 6000 pesos por tonelada para el Gran Rosario; 225 dólares para Bahía Blanca, y 215 dólares para Necochea. La BCBA informó que los molinos pagaron entre 6000 y 7200 pesos por tonelada del cereal, según calidad, procedencia y forma de pago.

En el Matba, la posición del trigo diciembre se mantuvo estable, en 220,50 dólares por tonelada, mientras que el contrato enero bajó un dólar, hasta los 223,50 dólares por tonelada.

La rueda fue levemente alcista para las cotizaciones del trigo en los Estados Unidos, por la persistente preocupación (y especulación) por la menor oferta del cereal en la Unión Europea, en Rusia y en Ucrania. Hoy se conoció la noticia de una compra de 400.000 toneladas de trigo forrajero ruso de parte de Alemania, uno de los países europeos más golpeados por la sequía.