Enrique Mantilla: “La Argentina tiene que exportar más si quiere combatir la pobreza”
El presidente de la Cámara de Exportadores de la República Argentina habla sobre el documento “Estrategia Nacional Exportadora: base del desarrollo sostenible”, elaborado por la institución, en el que se proponen cambios inmediatos y a futuro para fomentar la actividad
Desde 1943, exportar con valor agregado ha sido el objetivo de la Argentina. Un objetivo que al día de hoy continúa dentro de los planes de crecimiento del país. Es Enrique Mantilla, presidente de la Cámara de Exportadores de la República Argentina (Cera), quien arroja luz sobre esta situación tras ser consultado por LA NACION acerca de la creación de la institución. “En ese año, la Argentina exportaba solo el 15% con valor agregado, todo lo demás eran granos, por tanto, la Cámara vio la necesidad y la oportunidad de exportar con valor agregado. Había una posibilidad de industrializarse vía la exportación, además, al estar los mercados cerrados de Europa por la guerra, había que exportar valor agregado hacia las Américas, Sudáfrica y la India. La inserción inteligente era pasar del granero del mundo al valor agregado, y la segunda cuestión era enfocarse en la integración al mundo”, señala Mantilla. Además, habla sobre la “Estrategia Nacional Exportadora: base del desarrollo sostenible”, un documento elaborado por Cera donde se afirma que el crecimiento de las exportaciones es esencial para un crecimiento sostenido con inclusión.
–A 74 años de su creación, ¿cuál es el objetivo que tiene hoy la institución?
–La Argentina es un país que, si tomamos 1980/2015, para poner una cifra, la tasa promedio per cápita anual del PBI creció un acumulado del 0,7% y la población 1,2%. ¿El resultado? Mucha pobreza. Por otro lado, la estructura argentina desde los años 60 tiene una elasticidad de importación PBI del 3%. Por cada punto que crece el PBI, las importaciones crecen 3 veces más, o sea que es más dinámica que el nivel de exportaciones. Eso es endógeno, por eso se necesita una estrategia nacional exportadora que le de mucha importancia a optimizar la exportación y no tener cuellos de botella. Ese es nuestro objetivo.
–¿De qué se trata la estrategia nacional exportadora?
–La estrategia nacional exportadora es un concepto global. El crecimiento de las exportaciones es esencial para un proceso de crecimiento sostenido con inclusión. La Argentina, si quiere combatir la pobreza, tiene que exportar más y tiene que adecuar su estructura hacia eso. Esa estructura tiene su complejidad. Hay dos temas que hay que mirar bien: uno es el sistema impositivo, porque te condiciona. La tasa nominal fiscal corporativa hoy para una empresa es 35, pero la marginal es 43, siendo la segunda más alta del mundo. Entonces, cuanto más cadenas tenés, más costos tenés y no te conviene tener valor agregado, te conviene exportar con menos secuencia.
El segundo punto que hay que tener en cuenta es que la estructura logística de Argentina se quedó en el año 66. Si mejoramos la estructura logística e incorporamos además capacidad competitiva a todas las cadenas de valor vinculadas a las provincias, eso se transformaría en una oportunidad. Entonces, la estrategia nacional exportadora se basa en trabajar la complementariedad entre competitividad, crecimiento e inclusión.
–¿Que sería mejorar la estructura logística? Generar más rutas, ferrocarriles…
–Ferrocarriles, hidrovías, bajar los costos, crear una preferencia regional inversora. Al bajar los costos de todo el sistema logístico e impositivo se crea atracción de inversiones y se generan empleos, que es lo que necesita ahora la Argentina.
–¿Con la baja de impuestos también se genera empleo?
–Claro, porque atraes inversiones. El tema es cómo crear una preferencia regional inversora. ¿Cuál es la tasa de inversión de la Argentina en los últimos años? Un 16 o 17% pero, ¿cómo competís contra el sudeste asiático que está en el 32% de tasa de inversión? ¿o contra China, con el 43%? Hay que fortalecer lo institucional. Si el Estado quiere promover el desarrollo tiene que ser eficiente. Si tu aduana es la número 66 en el mundo y se quiere traer una inversión para armar una cadena de valor, la verdad no es muy atractivo. Hay que trabajar en tener una aduana de clase mundial.
–¿Y cómo se hace?
–Es muy sencillo, existe la Organización Mundial de Aduanas (OMA), todo un cuerpo de instrumentos de cómo se administra bien una aduana. Hasta tenés los manuales traducidos. Si se hace un acuerdo con ellos y te asesoras, haciendo las inversiones necesarias obviamente, con el tiempo, 5 o 6 años después, existirá una aduana de clase mundial. Como estamos muy malos en logística, muy malos en aduana y muy malos en trámites administrativos de todo tipo, entonces la alternativa es trabajar en todos los sectores con un plan, con una estrategia nacional exportadora.
–¿De dónde sale el modelo de estrategia nacional exportadora?
–Bueno, en países como Estados Unidos, en la época de Obama, se hizo la National Export Estrategies, allí el ahora ex presidente se comprometió con el programa para darle fuerza política en la administración, y sobre todo darle la fuerza política para las inversiones que hay que hacer en mejoras de la administración, porque es muy distinto poner a una persona para arreglar la aduana, por así decirte, que poner un plan de 5 años. Estas cosas no se arreglan en un día, entonces son muchos años, mucho trabajo, mucho esfuerzo… pero tener un plan pone una disciplina, es un camino soportado institucionalmente, es un hecho estructural, cargado de futuro. Y además es una orden que traspasa a toda la administración, que no depende de una persona u otra, porque es un programa ya existente, y en este caso, organizado por la OMA.
–Y sin importar el gobierno que esté, debería cumplirse lo ya establecido…
–Sí, tendría que haber un consenso. Además, lo bueno de esto es que está todo armado, ya está hecho por la OMA.
–No hay que inventar nada…
–Exacto. Está hecho hasta el manual de cómo medir los tiempos de levante de las mercaderías, todos los manuales traducidos al castellano.
–¿La estrategia nacional exportadora contempla también el rol del sector privado, digamos, en relación a cuáles sectores queremos que sean estratégicos para la Argentina para que exporten o cuáles son más competitivos?
–Eso se construye. El problema es el siguiente: ¿cómo está dividido el mundo hoy en el comercio internacional? Está vinculado a cadenas de valor, y se dividen en dos grupos distintos. Unas que se organizan desde el productor y cadenas de valor que se organizan desde los compradores. Por ejemplo, los supermercados dicen: “Vendeme vino con mi marca, no con tu marca”. Entonces es muy importante entender cómo son las cadenas de valor de los distintos sectores y para hacer eso hay que trabajar con los sectores; después qué es más estratégico o menos estratégico se irá analizando. Habría que hacer un diagnóstico en conjunto, un FODA.
–¿Qué mejoras para fomentar las exportaciones podrían hacerse en el corto plazo?
–Se podría implementar una ley de emergencia inversora para que todos los que exportan e inviertan puedan amortizar en el año que invirtieron todos los bienes de capital. Otra cuestión: existe un IVA de compras que se devuelve después de exportar. Sería bueno que la devolución de ese IVA de exportación pudiera pedirse en pesos o dólares, así el valor se mantiene en el tiempo.
–En tu discurso del día de la exportación de este año, vos mencionas que hay que darle prioridad al crecimiento y a la diversificación, ¿en qué sentido?
–Por ejemplo, en lo que va del 2017 se abrieron 39 destinos para 60 sectores productivos y se reabrieron 5 mercados para 7 productos.
Otro tema importante es que en todos lados del mundo hay muchas barreras nuevas, como la certificación de los productos que son saludables, que además han sido cosechados sin impactar negativamente al medio ambiente. Entonces hay que hacer que tu producción cumpla con esas barreras, que pase esas barreras, y además invertir en certificar. Como Estado debieras ir a hacer acuerdos para que las certificaciones valgan, porque hay mercados que para que ingrese tu producto tiene que estar todo aprobado por el sistema de allá. Tienen que haber más acuerdos, pero al mismo tiempo se tienen que profesionalizar y jerarquizar todos los sistemas para que sean reconocidos los certificados.
–¿La Cámara vislumbra alguna posibilidad de que se aplique alguna medida propuesta por el documento de estrategia nacional exportadora?
–Nosotros la hemos presentado. Esperamos que sí, porque el tema es el siguiente: si nuestra tesis de que las exportaciones son muy importantes para el crecimiento de nuestro país; y si es verdad que crean empleo; y si es verdad que traen divisas y me equilibran la balanza comercial; y si es verdad que la Argentina tiene que agrandar sus mercados, bueno, si es verdad todo eso, quien quiere el fin, quiere los medios.