De Vido dice que no faltará energía

El ministro de Planificación, Julio De Vido, afirmó ayer que el agua que tienen las represas eléctricas de la región del Comahue, ubicada en las provincias de Río Negro y Neuquén, "va a permitir encarar un invierno con más tranquilidad" y anunció que entre marzo y agosto próximo se sumarían 1000 megavatios al sistema energético nacional.

"El invierno va a ser mucho más ordenado que el año anterior y, fundamentalmente, con mayor volumen de energía, porque vamos a incorporar 1000 megavatios, cuando en la Argentina el consumo asciende a 17.800 megavatios", explicó De Vido, en declaraciones a Radio 10 y al canal de cable C5N, dos medios con los que el funcionario tiene diálogo frecuente.

El ministro dijo que desde su área se había dispuesto "un uso más responsable del agua" de las distintas represas y diques, y consignó que esta reserva "va a permitir encarar el invierno con más tranquilidad". "A esto le agregamos -continuó- que a mitad de marzo estaremos inaugurando el primer ciclo abierto de la central de Campana, ya que se hacen dos centrales [en la provincia de Buenos Aires y en Timbúes, en Santa Fe] a la vera del río Paraná, que en total suman 1600 megavatios."

El ministro sostuvo, además, que el crecimiento económico no peligraba por falta de energía. "Vamos a estar muy bien parados, ya que la Argentina, por su crecimiento económico, requiere 1000 megavatios anuales, y este año vamos a estar cien megavatios por arriba de esta cifra."

Sequía y malhumor

Las declaraciones de De Vido surgieron como respuesta a una nota publicada ayer en LA NACION, en la que se alertaba sobre el bajo nivel de la cota de agua en las represas del Comahue, una preocupación que tienen todas las generadoras eléctricas del país y de la que advierten periódicamente no sólo Cammesa, administradora del sistema, sino los propios técnicos del ministerio que conduce De Vido. Pero el ministro estaba ayer muy molesto. "Si el diario le pagó viáticos al periodista para que viajara a Neuquén, debería rever su política, porque o el hombre no fue o los lugareños con que habló le mintieron", dijo.

El ministro agregó: "Este año ahorramos agua durante el verano, generando electricidad fundamentalmente con gas, previendo que el agua la vamos a necesitar en el invierno cuando la demanda residencial reclama más gas para los hogares. En años anteriores, derramábamos el agua en el verano y, obviamente, en el invierno, si venían inviernos duros, teníamos problemas con el gas natural comprimido", admitió.