El objetivo es generar valor agregado a la soja
PARANA (De nuestro corresponsal).- La planta de la Dirección Provincial de Vialidad de Entre Ríos es apenas una experiencia casera si se la compara con el emprendimiento denominado Biocombustibles Entre Ríos -Bioer-, que impulsan grupos de medianos empresarios de la provincia, con la coordinación del productor Carlos Ameglio, en Galarza, departamento de Gualeguay.
El proyecto, con el visto bueno del gobierno provincial pero sin capital aún para concretarlo, radica en el aprovechamiento integral de la soja con aceite para combustible y pellets para el sector avícola (los pollos de Entre Ríos representan el 60% de toda la producción nacional).
"Necesitamos una planta aceitera junto a la de biodiésel, porque si el productor no maneja el precio del aceite, no cierran los números", dijo Ameglio, aunque admitió que la cooperativa La Protectora de Galarza comercializó durante 2001 unos 400.000 litros de biodiésel elaborado en Pilar, Buenos Aires, y que en Urdinarrain, por ejemplo, se llegó a vender a 41 centavos el litro cuando el gasoil se conseguía a 55 centavos.
Ameglio sostuvo que su proyecto permitiría "generar valor agregado a nuestra producción, porque aquí se va mucho poroto de soja, vuelve en harina y no genera empleo".
Si se cuentan las tres provincias de la región Centro, Entre Ríos es la que presenta el mayor crecimiento en el cultivo de la soja (1273% en 10 años), pero tiene sólo el 2% de la capacidad aceitera, mientras que Santa Fe concentra el 85% y Córdoba el 13% restante, según estadísticas de la Bolsa de Comercio de Córdoba. En los planes de Bioer se incluye la elaboración de combustible con colza y grasa bovina, con el auxilio de la tecnología austríaca.