La Udesa tiene nuevo rector

Las organizaciones, como la vida, pasan por distintas etapas. Al primer momento de la planificación de un proyecto y su concreción le sigue un período de crecimiento que confirma las bases sobre las que se fundó la idea. Más tarde vendrá la etapa de la estabilidad y consolidación definitiva.

Cada uno de estos momentos debe ser acompañado por las personas y políticas adecuadas para asegurar el éxito de la empresa. Percibir cuando llega el tiempo de un cambio de conductor es una de las cualidades más reconocidas dentro de las organizaciones actuales. Desde hace más de un año, la Universidad de San Andrés (Udesa) comenzó una exigente búsqueda para encontrar un reemplazante de Francisco von Wuthenau, primer rector y pieza fundamental en el nacimiento de la institución, que había decidido su retiro. De esta manera, se cerraba una etapa de doce años al frente de la Universidad y se abría otra nueva, que debía confirmar lo hecho durante ese tiempo y abrirse paso en el nivel internacional.

Búsqueda y perfil

Para la búsqueda del nuevo rector se creó un search comitee (comité de búsqueda) formado por tres personas del comité universitario, grupo de personas que conforman el board, organismo de gobierno máximo de la Universidad. Este comité trabajó a la par de una consultora en el proceso de selección del reemplazante.

Luego de meses de entrevistas personales -en total se presentaron 96 candidatos- se hizo una preselección y se eligió una terna que también fue entrevistada. De allí surgió el nombre de Jorge Sanz, que finalmente se quedó con el cargo a partir del 1º de diciembre último.

Lo novedoso de la designación de Sanz al frente de la institución es su perfil laboral, que incluye experiencias en el ámbito académico y corporativo. Doctor en Ciencias de la Computación y Matemática aplicada de la Universidad de Buenos Aires (UBA), trabajó como profesor full time en la Universidad de Illinois, Estados Unidos, y luego se dedicó a la investigación en distintos tipos de industria. Los últimos años los pasó en la gestión ejecutiva, primero en IBM y luego en una strartap de Internet durante diez meses. "En mi carrera, siempre combiné la gestión empresarial con la actividad académica en distintos momentos de mi vida. Eso me dio una perspectiva muy interesante, porque puedo decir que conozco los dos lados del camino", asegura Sanz.

La designación de Sanz marca un precedente en la elección de rectores universitarios. Por lo general, se privilegia la formación académica y no se considera su experiencia laboral en empresas.

"Creo que eso es un error. Un rector debe tener un fuerte background teórico, pero al mismo tiempo reunir aspectos de management tanto para el manejo interno como externo para poder ubicar la institución en el nivel internacional", sostiene Sanz. Aunque habrá una continuidad académica en todo lo que se viene haciendo, el nuevo nombramiento estará acompañado por una etapa de cambios, más ambiciosa y expansiva. "Quisiera que San Andrés de aquí a unos años fuera una de las tres universidades más importantes de América latina. Me gustaría darle más trascendencia internacional y que fuera reconocida como una institución líder en el continente".

"La segunda gran meta es consolidar las actividades que se vienen desarrollando y ampliar la masa crítica de los estudiantes sin perder los estándares de calidad que nos caracterizan", sostiene. Por último, Sanz reconoce que le gustaría crear una fuerte cultura emprendedora en los estudiantes. "Eso en parte se logró porque en el mercado muchos proyectos de Internet que hoy subsisten fueron hechos por graduados de San Andrés. Pero es importante que el joven sepa que el emprendedor no es el que prueba una vez y triunfa, sino el que luego de varios intentos sigue probando y probando".

Por Laura Reina

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