Fuerte repunte en la venta de usados
Las ventas de automotores usados subieron un 13,06% en noviembre frente a igual mes de 2008, según el informe mensual elaborado por la Cámara del Comercio Automotor (CCA), que destacó que el mes pasado registró el mayor crecimiento interanual del año.
Alberto Príncipe, presidente de la CCA, apuntó que noviembre superó los aumentos de agosto (el 1,48%) y septiembre (el 1,34%). El directivo recordó: "En octubre, hablábamos de una baja del mercado para 2009 de entre el 9 y el 10 por ciento. Ahora esperamos que la reducción sea inferior al 8 por ciento".
Con las cifras de noviembre y las previsiones para este mes, lo que se observa es "un mercado demandado", según Príncipe.
La cámara informó que durante el mes anterior se comercializaron 113.000 unidades usadas en todo el país, frente a los 100.297 coches de noviembre del año pasado.
No obstante, al comparar los once primeros meses del año con igual período de 2008, se observa que las ventas sufrieron una disminución del 7,77 por ciento: de 1.311.037 unidades a 1.209.180.
En el comparativo de noviembre contra octubre, las ventas de coches usados bajaron un 4,56 por ciento. Desde 2000 hasta la fecha, el mes de noviembre con menos ventas fue el de 2001, con apenas 47.396 autos transados.
Posteriormente, las ventas registradas en ese mes anotaron incrementos consecutivos hasta 2007, cuando se comercializaron 125.458 unidades.
Desafíos en 2010
El freno de la actividad por la crisis internacional, sin embargo, empezó a sentirse el año pasado, cuando las ventas de autos usados descendieron a 100.297 unidades, pero luego de ese bajón sobrevino la recuperación de 2009.
El presidente de la CCA se mostró optimista con la recuperación del mercado de los vehículos usados y sostuvo: "El año 2010 llega con muchos desafíos".
"El mercado anterior desapareció, éste es un nuevo mercado, pero apostamos a recuperar el volumen perdido en 2009 y a recuperar la rentabilidad, que este año no existió", sostuvo Príncipe.
El dirigente destacó la necesidad de lograr líneas de créditos blandos para la compra de automotores, como una herramienta para reactivar el mercado del usado.