Relanzamiento hacia 2025
El corto plazo se come todo. Hay que resolver lo inmediato que se impone y barre con los planes más o menos ordenados. Hay mucho de eso en este tiempo ¿no? Estoy un poco obsesionada con la idea de que todo lo que hago hoy no responda solamente a sobrevivir al presente o a cumplir con lo que pide la exigencia diaria del cortísimo plazo, sino que tenga una porción de construcción del mediano y el largo plazo. Sí ya sé, estamos agotados y solo planificar la próxima semana se hace cuesta arriba, pero cómo invertimos nuestro tiempo y prioridades hoy construye en parte nuestro futuro. Les propongo mirar, con un poco de optimismo si me permiten el atrevimiento, unos años en el futuro. ¿Cómo les gustaría verse en 2025? ¿Qué les gustaría estar haciendo en sus trabajos, en su desarrollo profesional?
Esta semana asistí a una interesante charla dictada del profesor PhD Fabián Salum de la Fundação Dom Cabral de San Pablo, organizada por AmCham, en la que habló sobre prácticas innovadoras para la salida de esta crisis. Y si bien su enfoque y propuestas eran ligadas a empresas, creo que bien valen cada una de ellas para pensar las estrategias que tenemos que desarrollar todos para repensar el valor de lo que ofrecemos, más allá de si son productos, servicios o de en qué industria nos desarrollemos. Inició con una frase de la especialista en management de Harvard Joan Magretta, que dice que "Detrás de cada teoría y herramienta hay un compromiso con el desempeño que cambia poderosamente nuestra economía y nuestras vidas". Trabajar en la mejora de ese desempeño es innovar de manera concreta.
Algunas de las preguntas que nos podemos hacer, que el especialista compartió, fueron: ¿Cuáles son mis competencias más distintas, raras o nuevas que tengo para desarrollar? Una vez que las identifico, puedo ponerlas a jugar con los productos o servicios más comunes que ofrezco para reorganizar así mi propuesta de valor. Otra pregunta central fue ¿Quiénes son mis principales clientes y cómo me estoy comunicando con ellos en este momento excepcional? Salum explicó esto con el ejemplo de un llamado telefónico con nuestros clientes o posibles clientes para compartir experiencias y decir "aquí estoy, cómo están ustedes", esto acrecienta la cercanía y puede también servir para re imaginar nuevas formas y canales de promover lo que hacemos y preparar un escenario post crisis.
Una clave para pensar un relanzamiento de nuestra propuesta de valor post pandemia es entender qué temas son los que más nos importan hoy como sociedad. Las personas y el propósito siempre son mencionadas por las marcas que construyen sus estrategias para ser significativas y memorables. Hoy, cuando el mundo atraviesa la crisis de Covid-19 juntos, el aspecto del cuidado de las personas, su bienestar y desarrollo ha surgido como aún más importante. Las empresas son cada vez más reflexivas sobre esto y también podemos serlo nosotros con nuestras propuestas.
La publicación Research World compiló los seis grandes temas a tener en cuenta a la hora de construir nuestras narrativas, comunidades e historias alrededor de lo que ofrecemos para que sea relevante de cara al futuro: la primera es salud y bienestar. Debido al Covid, esta tendencia ahora está llena de emociones fuertes como el miedo y la incertidumbre y ligada a esta también está la salud mental, un tema que crece en relevancia y que impacta en la vida de las personas y también en la economía de los países. Comunicación clara, publicidad reflexiva, innovaciones relevantes, pautas médicas especializadas, asistencia a los empleados en el lugar de trabajo, muchas puntas distintas para pensar cómo ofrecemos valor.
El tercero es el creciente valor de la comunidad, que está relacionado con la necesidad humana fundamental de pertenecer. Otros valores cada vez más ponderados son la Igualdad e inclusión, la importancia de estos temas siempre fue alta, pero ahora se ha vuelto más sensible. Desde antes de la pandemia y con un rol esencial, tendremos que hacer foco en la sustentabilidad y cuidado del medio ambiente, una agenda irreversible que las generaciones nuevas reclaman en sus consumos, elecciones y que tienen en cuenta para pensar dónde quieren trabajar.
La innovación es una herramienta de mejora. Mejora de desempeño, de enfoque, de procesos, de propuesta de valor y es una herramienta para levantar la cabeza hoy. Mientras seguimos "atajando los penales" de este presente, poder ver un poquito más allá hacia un relanzamiento de cara al 2025.