¿Qué conecta el ayer con el hoy y el mañana?
Los disturbios del 24 de noviembre, antes de la disputa de la final entre Boca y River, aumentaron las preocupaciones referidas a la seguridad durante la cumbre del G-20, que tendría lugar muy poco tiempo después. ¿Cuál es la probabilidad de que la próxima bola premie algún número de la primera docena, luego de tres bolas seguidas que premiaron números de un dígito? Preguntas como estas aluden al valor que tiene la autocorrelación cuando se trata de pronosticar.
Al respecto hablé con el norteamericano Arthur Stanley Goldberger (1930-2009), quien desde su tesis doctoral, dirigida por Lawrence Robert Klein y aprobada en 1958 en la Universidad de Michigan, se convirtió en pionero de la estimación de modelos econométricos. Continuaron colaborando, generando el denominado modelo econométrico Klein-Goldberger, para lo cual desafiaron problemas computacionales inimaginables por los jóvenes de hoy. "En 1951 computábamos con calculadoras electromecánicas de escritorio. Estimar una regresión con 20 observaciones y 4 o 5 variables nos llevaba días", recordó Goldberger en 1989. En 1964 publicó Teoría econométrica, que junto a Métodos econométricos, que John Johnston había publicado un año antes, fue uno de los manuales más usados durante la época.
-¿Cuál es la idea de la autocorrelación?
-Un comerciante vendió 10 camisas el lunes, 20 el martes y 30 el miércoles. En promedio, 20 camisas. Conjeturando cuántas podría llegar a vender el jueves, ¿a qué le presta más atención, a las 30 que vendió el miércoles o al promedio de los tres primeros días hábiles de la semana? Esta es la idea intuitiva de la autocorrelación, la de la relación que existe entre los diversos valores que adopta una variable a lo largo del tiempo. Otro ejemplo: para conjeturar qué le ocurrirá a la producción industrial durante diciembre de 2018, ¿conviene mirar lo que pasó en noviembre, en los 10 primeros meses de 2018 o en el promedio desde que Arturo Frondizi fue presidente?
-1950 y 1951 fueron años muy importantes en esta materia.
-En efecto, en esos años James Durbin y Geoffrey Stuart Watson publicaron un par de monografías, en las que dieron a conocer un test asociado con sus apellidos, que permite medir el grado de autocorrelación que tienen las variables. Hasta ese momento se conocía el problema, pero el aporte de Durbin y Watson fue precisamente diseñar un procedimiento para medirlo y actuar en consecuencia.
-Si lo entiendo bien, el referido test pertenece al plano estadístico, pero a mí me interesa el plano causal.
-Lo entiende bien, pasemos entonces al plano causal.
-Quienes vieron los disturbios que se produjeron en la previa de la final entre Boca y River se preguntaron lo que podría llegar a ocurrir durante la reunión del G-20, pero resulta que afortunadamente pasó exactamente lo contrario.
-Interesante ejemplo, que muestra los peligros de pronosticar de manera mecanicista. Más aún, hay situaciones en las cuales resulta más plausible pronosticar lo contrario, es decir, pensar en autocorrelación negativa o inversa.
-Deme un ejemplo.
-La hipótesis del funcionamiento eficiente de los mercados financieros, expuesta principalmente por Eugene F. Fama, sugiere que "no es posible ganarle al mercado de manera sistemática", es decir que no es posible que alguien pueda, de manera permanente, obtener una rentabilidad superior al promedio. Lo cual tiene una implicancia clara y dramática.
-¿Cuál es?
-Que si alguien le confió sus ahorros a un administrador de fondos que en el pasado obtuvo más rentabilidad del promedio, aunque parezca paradójico, lo que conviene hacer es cambiar de administrador, antes de que la suerte le comience a jugar en contra.
-Lo cual nos llevaría al terreno de las probabilidades.
-Exacto, nos llevaría a ese terreno. Al respecto, le refiero el siguiente caso: entre los aviadores de la Segunda Guerra Mundial existía un "principio" de implicancias angustiantes, según el cual en alguna de las primeras 30 misiones algo grave les habría de ocurrir. Pues bien, el ex primer ministro del Reino Unido Winston Churchill relata en sus Memorias de esa guerra que los pilotos que ya habían cumplido 28 misiones y nos les había ocurrido nada no querían volar más. Entendible desde el punto de vista humano, incorrecto desde el análisis de las probabilidades.
-¿Cómo es eso?
-No es lo mismo preguntar ¿cuál es la probabilidad de que me pase algo en alguna de 30 incursiones aéreas? que preguntar ¿cuál es la probabilidad de que me ocurra algo en las próximas dos, dado que no me pasó nada en las 28 anteriores? La respuesta a la segunda pregunta es: la probabilidad de que a vos te ocurra algo en los dos próximos vuelos es exactamente la misma que enfrenta en los primeros dos vuelos quien todavía no voló nunca.
-¿Qué surge entonces de todo este análisis?
-Que la cuestión de la autocorrelación, como todo en la vida, no se tiene que analizar de manera mecanicista. El pasado y el presente son una guía, y para conjeturar el mañana lo que pasó ayer es más importante que lo que ocurrió en la Revolución de Mayo de 1810. Pero además de todo hay que pensar.
-Don Arthur, muchas gracias.