Queja brasileña por la ley de medios

La poderosa industria publicitaria de Brasil puso el grito en el cielo: la aplicación en la Argentina de la nueva ley de medios reducirá fuertemente su facturación porque ya no podrá exportar a su vecino. Así lo afirmó Leyla Fernandes, presidenta de la Asociación Brasileña de Producción de Obras Audiovisuales (APRO), durante el Festival Internacional de Publicidad Cíclope, que termina hoy en el hotel Faena.

"El mercado brasileño se verá afectado en las producciones más importantes, estimamos que habrá una disminución de 15 a 20 por ciento en la facturación", que podría ser de unos US$ 140 millones, dijo Fernandes a La Nacion.

Según el inciso a del artículo 81 de la ley de servicios de comunicación audiovisual, los canales y señales nacionales, como Telefé, Canal 13, C5N o Crónica, sólo pueden emitir spots publicitarios producidos en el país. Eso significa que empresas regionales, como Penalty, Petrobras o Natura, ya no podrán importar y doblar al español las promociones de sus productos.

Fernandes advirtió que "cualquier restricción impuesta a la libre empresa, sea de publicidad o de heladeras, afecta negativamente a ambos países. Si la ley de medios argentina está violando el protocolo del Mercosur, Brasil tendrá que quejarse, pero es algo que todavía estamos estudiando". El enojo brasileño es todavía mayor porque, a pesar de la existencia del bloque regional, sus agencias tendrían en el mercado argentino más restricciones que las estadounidenses.

Los canales propiedad de cadenas extranjeras, como Fox, Warner o Sony, podrán seguir emitiendo avisos realizados fuera del país aunque se vean fronteras adentro. "No podemos entender que un país vecino pueda tener una relación tan diferente y beneficiosa con una gran potencia al tiempo que deja a Brasil en una situación de desigualdad. Todos ya sufrimos con otros acuerdos que siempre benefician a las potencias. Eso nos parece fuera de todo contexto en el Mercosur", dijo Fernandes.

Los avisos publicitarios realizados en el extranjero representan entre 10 y 15% de todos los emitidos en el país. La emisión de publicidad producida fuera del país fue autorizada por el gobierno de Carlos Menem en 1993. La marcha atrás que produjo ahora la nueva ley de medios fue cuestionada por la Cámara Argentina de Anunciantes (CAA) durante el tratamiento parlamentario de la norma. En ese contexto, la CAA sostuvo que "esta restricción fue empleada en el pasado sin éxito. La pujante industria de exportación de comerciales se basa en la apertura al mundo y representa una importante fuente de trabajo y talento argentino. Cerrarnos al mundo es correr el peligro de asfixiar esta valiosa industria".

De hecho, la queja brasileña podría volverse un boomerang en los mercados internacionales, donde la creatividad publicitaria argentina viene ganando espacio, si se aplican criterios de reciprocidad. "Somos socios y hermanos, creemos que la industria audiovisual argentina tiene tanto talento como la brasileña y no necesitamos entrar en una batalla donde sólo nuestros países saldrían perdiendo en un mundo globalizado", indicó Fernandes.