Verano “muy tranqui”: los turistas extranjeros sostienen las ventas de los comercios en el arranque del año

Enero suele ser un mes difícil para el comercio y este año parece haber sido aún más complicado. Según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), las ventas minoristas a nivel nacional cayeron 0,3% respecto del primer mes de 2022. Sin embargo, a pesar de que se observó una reducción en las compras, los gastos de los 1.182.736 visitantes extranjeros que llegaron al país habrían servido para compensar el recorte.

“El turismo traccionó mucho y ayudó a que la caída no sea mayor”, dijo Alfredo González, presidente de CAME, luego de la difusión del Índice de Ventas Minoristas Pymes del primer mes del año.

Según afirma el informe de CAME, el gasto en enero se volcó más a servicios, como turismo, ocio, recreación o gastronomía, y explica que se postergaron compras de bienes habituales de temporada. Los rubros que más cayeron a nivel nacional fueron Textiles e indumentaria (-14,4%) y Calzado y marroquinería (-2,5%).

Los resultados de un relevamiento que hizo LA NACIÓN en tres áreas comerciales importantes del AMBA arrojan conclusiones similares. Para muchos locales de Palermo y Tigre las ventas del primer mes del año fueron más bajas, en términos reales, que las del año previo.

En el microcentro porteño, sin embargo, los números de los negocios parecen haber sido (en promedio) mejores que los de 2022. Hay que considerar que el año pasado los flujos de turistas internacionales estaban todavía afectados por las olas de Covid, por lo que los indicadores positivos parecen estar relacionadas al bajo del punto de partida.

Más allá de las diferencias, hay un denominador común en las distintas zonas relevadas: las compras de los extranjeros es el motor del comercio este año.

Según fuentes oficiales del Ministerio de Turismo y Deporte, en enero ingresaron a la Argentina 1.182.736 personas, que gastaron aproximadamente US$581 millones, un nivel cercano al que existía en la prepandemia, indicaron. Respecto de los orígenes, un 19,3% provino de Brasil, 15,3% de Chile,13,5% de Uruguay y 11% de Estados Unidos.

Microcentro: año nuevo, oportunidad nueva

En los alrededores de la calle Florida, los turistas son vitales para los comercios: las compras de los visitantes extranjeros representan entre el 50% y el 80% de su facturación en temporada alta. Por eso, ante la mayor afluencia de turistas este año, la zona encuentra una mejora en las ventas de enero versus las de igual mes de 2022.

“Se vendió mucho a los turistas extranjeros. Siempre es un mes complicado, pero este enero superó nuestras expectativas. Vendimos más que el año pasado”, dice Karen, empleada de un local de ropa femenina ubicado en la calle Florida. “El brasileño mira mucho, pero compra poco”, agrega. Los comerciantes en general sostienen que los visitantes de Brasil gastan más que nada en hotelería y gastronomía.

“Los turistas que se bajan de barcos y cruceros nos han ayudado mucho desde diciembre”, coincide Leonardo, de un local de valijas situado en Galerías Pacífico. Sin embargo, no todos los comercios del microcentro parecen haber tenido la misma suerte.

“Enero fue terrible, se vendió muy poco”, protesta Agustín, empleado de un reconocida tienda de indumentaria. “Las ventas en enero estuvieron muy tranqui”, aporta Luis, empleado de un local de calzado, y matiza: “Este año se nota mucho más la crisis, no hay nadie en la calle. Los turistas ayudan, pero no compensan”.

Algunos comerciantes de indumentaria ponen sus esperanzas en la nueva colección que entra en febrero, pero otros son más pesimistas. “Este mes todos van a priorizar los gastos de la escuela y nosotros vamos a quedar afuera”, explica Vanina, empleada de una tienda de indumentaria masculina de primera marca.

Tigre: la vida después del Mundial

Enero es temporada baja para los negocios del Puerto de Frutos. Sin embargo, para algunos comerciantes, las ventas del mes fueron mejores que las de noviembre y diciembre. Una tendencia muy poco habitual que tuvo su explicación en el Mundial, que postergó las compras.

“Las ventas de enero superaron nuestras expectativas”, dice Micaela, dueña un local y de una la fábrica de bolsos. “Los meses previos fueron más difíciles”, amplía.

“En enero vendimos un 25% menos que el año pasado”, dice María José, quien maneja una tienda de decoración. “El público cambió. Ahora le vendemos principalmente a los uruguayos, que compran mucho”, añade.

“Se notó mucho que hubo poco turismo del interior”, analiza por su parte Paola, empleada de otro local de decoración, quien observó la merma de colectivos que solían llegar con turistas argentinos.

Palermo y un arranque “flojo”

“El mes pasado vendimos menos de lo que esperábamos”, asegura Jimena, quien atiende un conocido local de ropa femenina en la esquina de Gurruchaga y Loyola, en Palermo. “A pesar de que vendimos un poco más que el año pasado, las ventas de enero fueron flojas”, dice Jesica, encargada de una tienda vecina. “Empezamos este mes con los descuentos, pero febrero viene duro”, amplía. Varios comerciantes aseguran que “vienen mal” desde diciembre.

Uno de los inconvenientes que tuvieron que enfrentar los comercios de Palermo fueron los reiterados cortes de luz. “Las interrupciones de energía nos afectaron mucho: no se podía facturar y la gente no podía elegir”, dice la empleada de una conocida tienda de indumentaria para mujeres.

En general, en los locales consultados coinciden que, en estas fechas, cerca de la mitad de las compras de la zona las hacen los turistas. Además de uruguayos, chilenos y estadounidenses, desde diciembre se amplió el espectro de países desde donde llegan compradores. “Desde fin de año han venido a comprar muchos rusos, algo que antes era más bien esporádico”, destaca Marcelo, de otro reconocido local de ropa, quien añade que febrero “empezó bastante mal”.

Los comerciantes esperan que este mes traiga buenas noticias. El presidente de CAME asegura que, en línea con lo que suele suceder en febrero, también prevén que la actividad se reactive. “Esperamos que el consumo mejore. Sabemos, por supuesto, que eso va a depender de cómo evolucione la inflación y macroeconomía”, cierra.

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