Niño con capacidades superiores
Benjamín tiene 7 años y está cursando 4°grado, cursó 2° y 3° en forma simultánea, pero la Dirección de Escuelas bonaerense pretendió que repitiera 2° año por no estar contemplada dicha posibilidad. Los padres recurrieron a la Justicia por vía de amparo, el juez lo entrevistó y constató que tenía capacidades especiales y atendió a su pedido de que no lo atrasaran en sus estudios.
El juzgado se basó en el derecho a aprender y en la Convención para los Derechos del Niño, entendiendo con criterio realista que las capacidades de Benjamín le permitían recibir formación acorde con estas y no ser condenado a recibir menos de lo que estaba capacitado para asimilar. Quería estar en clases con chicos más grandes, donde se sentía cómodo e interesado.
Fuentes de la Dirección de Escuelas informaron que respetarán la decisión judicial y que autorizarán el ingreso a 4° año durante 2022, tal como lo había dispuesto el juez, asegurando que instrumentarán acciones de acompañamiento para que el niño pueda alcanzar los objetivos pedagógicos. Es decir que existirían apoyos no solo para quienes tienen capacidades diferentes que podrían atrasarlos, sino también para quien las tiene en grado superlativo.
Es importante que las dependencias educativas contemplen estos casos con la suficiente flexibilidad, y que se evite tener que recurrir a la Justicia para resolver cuestiones que deberían quedar en el ámbito educativo.