¿Cómo fue el accidente del vuelo Río-París que ocurrió en 2009?
En 2009, el avión A330 desapareció de los radares durante unas horas mientras atravesaba una tormenta y, luego, se desplomó en pleno vuelo; la justicia francesa absolvió hoy a las empresas involucradas en esta tragedia en la que murieron 228 personas
LA NACION
Este lunes, la justicia francesa absolvió a las empresas Airbus y Air France por el accidente aéreo ocurrido en 2009, cuando el vuelo AF447 —que iba de Río de Janeiro a París— se estrelló contra el mar Atlántico y murieron 228 personas, una de las cuales era argentina.
Si bien en 2019 los jueces de instrucción sobreseyeron el caso, los familiares de las víctimas y los sindicatos de pilotos recurrieron la sentencia y, en mayo de 2021, la Justicia envió a juicio a ambas compañías por homicidios involuntarios.
Durante el nuevo juicio, que inició en octubre pasado, los fiscales franceses dijeron que no se podía demostrar la culpabilidad formal de las firmas y señalaron que no se habían encontrado suficientes pruebas de infracciones penales por parte de estas compañías.
En este sentido, la fiscalía del Estado pidió la absolución y atribuyó la mayor parte de la responsabilidad a los pilotos, quienes murieron en el accidente. Del mismo modo, los abogados de Airbus —la firma que fabrica aviones— también culparon a los pilotos, mientras que desde Air France dijeron que la causa del choque nunca se sabrá con exactitud.
La investigación oficial determinó que varios factores contribuyeron al choque; entre ellos, errores de los pilotos y la congelación de sensores externos de la aeronave. Entonces, el tribunal de París concluyó que, si bien las dos empresas cometieron “faltas”, no se “pudo demostrar ningún vínculo causal seguro” con el accidente.
¿Cómo fue el accidente de Air France de 2009?
La noche del 1° de junio de 2009, el vuelo AF447 de la compañía Air France despegó del aeropuerto Galeao de Río de Janeiro con destino final París. Tras haber comenzado su travesía sobre el océano Atlántico, desapareció de los radares unas horas mientras atravesaba una tormenta y se desplomó en pleno vuelo. Los 216 pasajeros y los 12 tripulantes que iban a bordo del avión A330 ―con matrícula F-GZCP― murieron, por lo que se trató del accidente más mortífero de la historia de las compañías aéreas francesas.
Entre las víctimas había 61 franceses, 58 brasileños, 28 alemanes, nueve italianos, dos españoles y un argentino, entre otros.
En los días posteriores al accidente, se encontraron los primeros restos del avión y de los cuerpos. Sin embargo, recién dos años después se logró localizar la caja negra, que estaba a 3900 metros de profundidad. De esta forma, se pudo confirmar que los pilotos, desorientados por un fallo en las sondas de velocidad Pitot en medio de la noche cerca del Ecuador, fueron incapaces de frenar la caída del aparato, que se produjo en menos de cinco minutos.
Tras esa catástrofe, el modelo de esa sonda que llevaba el Airbus del vuelo AF447 fue reemplazado en todo el mundo.
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