La elección del nuevo fiscal general abre otro frente para Bolsonaro

RÍO DE JANEIRO.- La designación del nuevo procurador general de la república abrió nuevos frentes de conflicto para el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, ya que el elegido, Augusto Aras, es considerado demasiado alineado con las políticas conservadoras del mandatario, pero también un crítico de ciertos aspectos de la operación anticorrupción Lava Jato.

Aras, un constitucionalista bahiano de 60 años y católico, especializado en derecho económico, no ha ocultado sus cuestionamientos a la llamada "ideología de género" y la criminalización de la homofobia y ha apoyado las posturas de Bolsonaro en defensa del agronegocio frente a los ambientalistas en medio de la crisis que suscitó el número récord de incendios forestales en la Amazonia. Ha dicho también que se opone a los "métodos personalistas" del Lava Jato, comentarios que fueron vistos como un mensaje directo contra el exjuez Sergio Moro, actual ministro de Justicia. Y fue designado por Bolsonaro por fuera de la lista de tres recomendados que tradicionalmente -desde 2003- sugiere la Asociación Nacional de Procuradores de la República (ANPR). Ahora, su designación para reemplazar a la procuradora Raquel Dodge, deberá pasar al Senado para su aprobación.

En un comunicado, los fiscales de la ANPR señalaron que la Procuraduría General de la República (PGR) debería ser ocupada por un "independiente" y resaltaron que los dichos de Bolsonaro de que buscaba alguien alineado con él "revelan una comprensión absolutamente equivocada sobre" el Estado de Derecho y convocaron a una manifestación el lunes contra la designación.

Para el diario Folha de S. Paulo, la designación "es una derrota de Sergio Moro, que intentaba convencer al presidente de que Aras, hoy subprocurador general, no apoyaba el Lava Jato". Sin embargo, el ministro -que últimamente ha tenido varios roces con el mandatario- se apuró en dejar en claro que respalda la decisión. "Todos los deseos de que tenga una buena gestión", escribió en su cuenta de Twitter.

Lo más curioso ha sido que entre los críticos de la designación ha habido muchos grupos de derecha simpatizantes de Bolsonaro. En las redes sociales, reflotaron viejos comentarios de Aras en los que elogiaba al Che Guevara ("era un gran soñador") y al referente de la Teología de la Liberación Leonardo Boff, por lo que de inmediato lo calificaron de "izquierdista". Fue tal la cantidad de comentarios negativos de sus seguidores que el propio presidente los llamó a borrar esos mensajes en su transmisión en vivo por Facebook.